La plantilla del Covirán Granada ha aprovechado el parón liguero de la pasada semana debido a la ventana FIBA para "recargar pilas, sobre todo en el aspecto mental", según ha señalado el entrenador del conjunto nazarí, Pablo Pin.

Los jugadores han tenido tiempo para disfrutar de algunos días de descanso y para preparar a conciencia el próximo compromiso liguero ante el rival más fuerte del Grupo B de la LEB Oro, pues este domingo se medirán al Alicante (19:00 horas).

El preparador granadino se mostró contento porque el parón ha venido bien para la recuperación de Alejandro Bortolussi, que ya ha superado el positivo en coronavirus que lo ha tenido en cuarentena, y Christian Díaz, que tuvo que perderse una convocatoria con la selección nacional 3x3 debido a una torcedura en un tobillo y que desde inicios de esta semana entrena con normalidad junto al resto de sus compañeros.

Por lo tanto, todos los componentes de la plantilla nazarí están a disposición del técnico para el importante encuentro ante el conjunto levantino.

Lo único que lamenta el preparador granadino es que el Covirán no ha podido jugar un partido amistoso tal como era su deseo para no perder el ritmo competitivo de sus jugadores debido al estado de confinamiento perimetral impuesto por la Junta de Andalucía en su lucha contra el coronavirus.

El balance de estos días sin liga es positivo para Pin, que destacó que sus jugadores se han ejercitado "con intensidad" y que los ve "con muchas ganas de jugar ante Alicante".