Recreativo | almería b

Remontada con fútbol

  • Una notable segunda parte permite al filial ganar de forma justa un choque que se le puso pronto cuesta arriba

  • Nacho Buil firma el gol del año y Antonio Marín, el tanto final en el 90'

El Recreativo Granada venció por 3-2 al Almería B de forma justa en un partido que se le puso cuesta arriba muy pronto y que remató en los compases finales con un tanto de Antonio Marín después de una gran segunda parte. El filial demostró ante su público que el buen inicio de campaña que está firmando no es una casualidad. Tenía bajas pero se repuso tanto a las ausencias como a dos mazazos en contra en forma de goles del rival. No sólo venció. Jugó bien al fútbol, Pedro Morilla acertó con los cambios y Nacho Buil firmó el mejor tanto visto hasta ahora en la ciudad deportiva rojiblanca.

La gran novedad de la mañana, llevadera en lo climatológico al principio pero muy calurosa en el cuarto final del encuentro, fue la primera titularidad de Martin Hongla con el Recreativo esta campaña. El camerunés fue en la primera parte el pivote defensivo de su equipo, que partió con defensa de tres y dos carrileros. Morilla movió piezas en el descanso. Colocó a Hongla en el centro de la línea de tres zagueros tras sustituir a Nacho Buil por Eliseo. Andrés García y Yael retrasaron su posición para formar un doble con el pivote en la medular con el que los nazaríes funcionaron y lucieron en el segundo tiempo. Hongla estuvo bien. En Segunda B va sobrado.

El Almería B sólo mandó en el partido en los diez primeros minutos. Salió el Recreativo legañoso y lo pagó caro. Darío aprovechó un balón perdido por los rojiblancos en la salida para colarse entre Antonio Marín y Paco Torres, y superar a Lejárraga en el mano a mano.

Un cuarto de hora tardó en desperezarse el filial, que despertó de la mano de Yael, el mejor del partido, y de Neva, siempre muy activo por la izquierda. Paco Torres estropeó con un mal control una buena jugada entre ambos; Guille Lara, con diferencia el mejor de los visitantes, se lució ante el chut de Ontiveros tras gran jugada personal de Yael; y Andrés García pidió un penalti que pareció pero que no pitó Peña Valera, que firmó una muy buena actuación con el silbato para no desentonar en un choque divertido y vistoso para el espectador.

En la primera mitad ocurrió muy poco más. Controlaba bien el juego el Almería B y el Recreativo sólo rozó el gol en un chut de Andrés García, ante el que respondió a la perfección Guille Lara. En la última jugada del primer tiempo, Héctor empató rematando con el pecho en boca de gol un balón puesto desde la esquina que ningún zaguero visitante acertó a rematar. 1-1 y descanso.

El Recreativo fue muy superior en el segundo acto. El equipo ganó en presencia ofensiva con Nacho Buil en el campo y pasó por encima de un Almería B que estuvo a punto de llevarse un punto sin merecerlo. Jean Carlos y el propio Buil buscaron el 2-1 sin acierto antes de que Andrés García volviera a toparse con una pesadilla llamada Guille Lara.

El gol que llevaba un rato palpándose llegó a la hora de juego. Y qué gol. Una de las muchas buenas acciones trenzadas de los locales acabó en la derecha, con desmarque y toque de Andrés García para el centro de primeras de Paco Torres. Nacho Buil se inventó una espectacular volea medio chilena, cogiendo el balón muy arriba y golpeándolo con violencia. Un tanto que hubiera firmado cualquier crack mundial.

El Almería B trató de irse arriba con 2-1 abajo, pero se topó con un Recreativo bien colocado y que controlaba a la perfección el choque. Incluso Yael rozó el tercero con un disparo que no encontró portería. Lejárraga, casi un espectador durante toda la mañana, apenas tuvo que esforzarse ante los cabezazos inofensivos de Guirao y Lin.

Sin embargo, el filial regaló a los visitantes un par de faltas en zona peligrosa. En la segunda, Sergio llegó a pegar a la pelota hasta tres veces. En las dos primeras chutó contra la barrera, en la tercera el esférico tocó en un zaguero, se envenenó y acabó entrando con suspense tras tocar el poste.

Quedaban apenas cinco minutos más el añadido y parecía tarea imposible marcar un nuevo gol. Víctor Morillo, que estaba preparado para entrar antes del 2-2, sustituyó a Paco Torres y se colocó el Recreativo con zaga de cuatro. El destino tenía guardado su último guiño para el epílogo. El ex almeriense Antonio Marín, que estaba de lateral derecho tras pasar todo el choque en la zaga de tres atrás, se sumó al ataque para culminar con la testa un gran centro de Neva tras otra buena acción colectiva del filial.

Triunfo justo y de valor para irse hasta los siete puntos en cuatro jornadas. Buen inicio de Liga pero, ante todo, muy buenas sensaciones de nuevo. Este Recreativo Granada gusta y se gusta. Que siga así.

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