Treinta y cinco días después de la última cita disputada ante su afición, el Covirán Granada volverá este domingo al Palacio de Deportes para medirse, en una cita muy importante, al Surne Bilbao que dará comienzo a las 17:00 horas.

Los rojinegros están ante un encuentro importante para volver a la senda de la victoria pues acumulan cinco derrotas seguidas. El último partido disputado en casa fue el pasado 4 de febrero ante el Baxi Manresa en el que rozó el triunfo pero un triple en el último segundo a tabla de Marcis Steinbergs los dejó con la miel en los labios. La visita al UCAM Murcia y Lenovo Tenerife que se saldó con derrota y la paralización de la competición con motivo de la celebración de la Copa del Rey y las Ventanas FIBA ha hecho que haya pasado más de un mes sin que los aficionados granadinos vean a su equipo.

Será una cita con novedades. Por un lado, la grada rojinegra podrá ver en directo por primera vez a los nuevos fichajes. Se trata de Jacob Wiley y Elias Valtonen, que ya dispusieron de minutos en el choque disputado en el Santiago Martín de Tenerife. Ambos dejaron buenas impresiones, ya que se fueron hasta los 17 y 14 puntos, respectivamente, siendo el primero el más valorado del conjunto de Pablo Pin.

Además, también volverá a la que fue su casa el base Alex Renfroe, que defiende ahora la camiseta del conjunto vasco. El cuerpo técnico granadino se ejercitará durante todas las mañanas de la semana en el Palacio de Deportes para preparar la visita del conjunto vizcaíno. Las entradas para presenciar el partido están disponibles en la oficina del club de la avenida Salvador Allende hasta el viernes de 9:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00 h. o en la web venta.fundacioncbgranada.es.

Y, por si fuera poco, la entidad organiza la quinta edición de la Peque Race en colaboración con Puleva. El evento tendrá lugar durante el descanso del encuentro y se llevará a cabo sobre la pista del Palacio de Deportes cuando ambos equipos se retiren a vestuarios. Puleva se encargará de entregar regalos para todos los participantes, además de que el ganador de la prueba disfrutará de un año de leche de forma gratuita.

Los participantes deberán tener entre 6 meses y 1 año y no podrán andar, únicamente gatear durante toda la carrera. Los bebés tendrán que llegar lo más rápido posible a la meta con la única ayuda de sus seres queridos, que se ubicarán tanto en la línea de salida como en la de llegada. La distancia será de, aproximadamente, ocho metros. Durante la prueba se podrán utilizar los juguetes favoritos de los más pequeños para que completen lo más rápido posible el recorrido.