Los Presupuestos para 2017 abordan hoy su primer trámite parlamentario, el debate de las siete enmiendas a la totalidad que se votan mañana, pendientes del acuerdo que el Gobierno y el PNV negocian in extremis y que salvará las cuentas públicas gracias a los cinco votos de los nacionalistas vascos.

Aunque hay negociaciones desde el mes de marzo entre el Ejecutivo y los nacionalistas vascos, la posibilidad de un acuerdo "se activó" el pasado viernes cuando el PNV, para allanar el terreno, optó por retirar su enmienda a la totalidad.

El Ejecutivo de Vitoria aseguró ayer que hay "avances muy importantes" en torno al Cupo que, si llegan a buen término, podrían suponer "15 años de paz fiscal". Su portavoz, Josu Erkoreka, afirmó que "si todo va como debería ir", el País Vasco estará "a las puertas de una gran noticia económica" para la comunidad.

De hecho, el PNV confía en llegar a un acuerdo con el PP pero estima que la negociación podría cerrarse con el debate parlamentario ya iniciado, es decir, hoy o incluso mañana, cuando se votan las enmiendas. No obstante, el PP del País Vasco defiende que el pacto con la formación jeltzale sobre los Presupuestos no será de última hora, sino "el resultado de un proceso de meses".

Si finalmente hay acuerdo, el Gobierno sumará los votos de los cinco diputados nacionalistas vascos a los 170 ya garantizados entre el PP, Ciudadanos, UPN, Foro y Coalición Canaria, en definitiva, los apoyos necesarios para que no prosperen las enmiendas de PSOE, Unidos Podemos, ERC, PDeCAT, Compromís, Nueva Canarias y EH-Bildu.

El respaldo de 175 votos, la mitad exacta de la Cámara, es suficiente para rechazar las enmiendas en el debate a la totalidad; sin embargo, para el resto de la tramitación será necesario contar la mitad más uno (176) y es aquí donde el PP espera conseguir el respaldo del único diputado de Nueva Canarias, Pedro Quevedo, quien, no obstante, ha pedido la devolución de los Presupuestos. El acuerdo del PNV con el Gobierno supondrá para la comunidad autónoma beneficios en materia económica, política y administrativa pero, sobre todo, la revisión del Cupo vasco.

Para los siete partidos que han pedido la devolución de los Presupuestos, las enmiendas a la totalidad se justifican por entender que las cuentas públicas defendidas por el ministro Cristóbal Montoro son antisociales, consolidan la pérdida de poder adquisitivo y asfixian a las comunidades autónomas.