vida universitaria

Asociación Tuna de Ciencias de la Universidad de Granada: Cuatro décadas de custodia del legado

Asociación Tuna de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Granada.

Asociación Tuna de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Granada. / a

"La Tuna de Ciencias trabaja por darle continuidad a esta antigua tradición". Este es uno de los objetivos principales de esta Asociación de la Universidad de Granada (UGR), una agrupación que este 2024 celebra sus primeros cuarenta años de vida y que recoge con orgullo el testigo de los que les precedieron siglos atrás.

Su jefe, Santiago Navarrete Furuhata, recuerda que la tradición de rondar comenzó, como se señala en la web de la Facultad de Ciencias, hace unos 400 años. Desde entonces, agrupaciones estudiantiles han regalado su música "con todo nuestro cariño", especifica este tuno estudiante del grado de Matemáticas en la Universidad de Granada. 

"Es vida universitaria", reflexiona Navarrete sobre la dimensión de la tuna. Y su primera meta es "pasarlo bien". Así de claro. La música es un ingrediente clave para esta agrupación, que demuestra sus inquietudes con actividades como rondas, viajes o la participación en certámenes musicales. Así, la tuna de Ciencias ha podido llegar a Estados Unidos o a Japón, lugares en los que "a la gente le ha agradado nuestra simpatía".

Navarrete tiene 21 años y asegura que ser tuno le ha ayudado a ganar seguridad en si mismo y a no abandonar los estudios. Cuando le asaltaron las dudas sobre si continuar o no con el grado, sus compañeros de la tuna le animaron a no desistir. Ahí sigue con todo su empeño. Incluso en su familia le han asegurado que desde que es miembro de esta agrupación este joven ha cambiado. "Antes no era capaz de hablar en público", asegura.

"Lo que hace falta es tener actitud y ganas", resume el representante de la agrupación de Ciencias sobre las cualidades que debe tener un tuno. "Hay quien llega sin saber nada de música". "Es una cosa sana, que no hace daño a nadie", añade sobre la imagen preconcebida que existe sobre la tuna universitaria en general, estereotipos que Navarrete conoce y que achaca a la "incomprensión". "He crecido en un mundo en el que la tuna estaba obsoleta", atestigua este estudiante, que incide en que lo que les mueve es la música.

La Tuna de la Facultad de Ciencias está abierta a estudiantado de otros centros de la UGR. "No hay restricción, incluso si no se es universitario se puede ser tuno", explica Navarrete, que insiste en que sí es necesario tener un compromiso y asumir la responsabilidad que conllevan los ensayos y actividades del grupo.

Practican todos los jueves a las ocho de la tarde en el aula G11 de Ciencias, pruebas que terminan con un "rato de distensión" ya fuera de la Facultad. Cuentan con redes sociales @tunacienciasgranada y animan a que cualquiera se pase por el lugar de ensayo para probar. Mantienen un grupo de una decena de tunos más o menos fijo más miembros que "van y vienen" en función de sus estudios.

Para este 2024, año en el que conmemoran su cuarenta aniversario, prometen sorpresas y mantener viva una tradición centenaria y no siempre entendida pero que ellos defienden bandurria en mano.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios