Agentes de la Policía Nacional han detenido en Granada en poco más de 24 horas a dos varones de 19 y 46 años, ambos con antecedentes policiales, anteriores como presuntos autores de sendos atracos a mujeres a las que agredieron para quitarles sus pertenencias. Se han recuperado una chaqueta y dos teléfonos móviles que han sido entregados a sus legítimas propietarias. Los policías intervinieron también una navaja y unas tijeras.

El primero de los robos ocurrió de madrugada, cuando un individuo sustrajo una chaqueta que estaba depositada sobre una mesa de un establecimiento de ocio ubicado en la zona centro de la ciudad y que contenía además un teléfono móvil tipo smartphone.

La propietaria se percató instantes después de la sustracción y salió del pub hallando a un varón con su chaqueta puesta e intentando vender su teléfono móvil. El individuo reaccionó golpeando en la cara y arrojando al suelo a la víctima, quitándose la chaqueta, y tirando al suelo el teléfono móvil al que fracturó la pantalla, emprendiendo la huida.

Cuando llegaron los agentes observaron a un varón huyendo a la carrera, por lo que iniciaron su persecución a pie durante la cual arrojó un objeto que posteriormente fue intervenido por los policías y resultó ser una navaja. Finalmente le dieron alcance, siendo detenido.

El segundo de los robos sucedió la noche siguiente cuando se recibió una llamada en la sala del 091 en la que varios testigos informaban de un forcejeo entre un hombre con el rostro tapado con un pasamontañas y un gorro, armado con unas tijeras y una mujer, en el barrio del Zaidín. Desplazados los policías con diligencia al lugar localizaron a la perjudicada que les informó que un varón la había intimidado con unas tijeras para quitarle su dinero y pertenencias y al negarse había forcejeado con ella, arrojándola al suelo, sustrayéndole su teléfono móvil.

Los agentes, también en este caso, localizaron al presunto autor en las inmediaciones y procedieron a su detención, recuperando el teléfono móvil y un billete de diez euros que devolvieron a la víctima. Del mismo modo intervinieron unas tijeras, un gorro y un pasamontañas que aún portaba el individuo.

Estas dos actuaciones, que no están relacionadas entre sí, fueron practicadas por policías pertenecientes al Grupo de Atención al Ciudadano (G.A.C.). Ambas víctimas fueron asistidas por las lesiones producidas que no revistieron carácter de gravedad.