Consumo paraliza 80.000 pares de zapatos que podrían ser tóxicos

Están siento analizados para determinar su contienen dimetilfumarato, una sustancia tóxica que causa quemaduras

Consecuencias de la alergia de la toxicidad en los zapatos.
Redacción / Granada

10 de abril 2009 - 01:00

El Servicio Provincial de Consumo de Granada paralizó ayer la distribución de unos 80.000 pares de zapatos que podrían contener dimetilfumarato, un producto tóxico que produce lesiones cutáneas y da reacción alérgica.

Según informó a Efe el Jefe del Servicio de Consumo, Manuel Ruiz, los zapatos provienen en su totalidad del continente asiático y se iban a distribuir a comercios de calzado de todo tipo de la provincia.

A la espera de lo que dictaminen las pruebas que se están llevando a cabo por diferentes grupos de expertos -se cogen tres pares de zapatos de cada modelo- Consumo inmovilizó toda esta mercancía después del aviso de la Guardia Civil de que podrían ser tóxicos.

Si finalmente este calzado no tienen ningún problema se devolverán a la importadora, que los pondrá de nuevo en el mercado. Sin embargo, en caso de que contuvieran dimetilfumarato, se intervendrán de manera directa y se abrirá la investigación necesaria.

La medida de frenar este tipo de llegadas de calzado no es nueva. El Ministerio decidió prohibir la comercialización de calzado, sillones y cualquier artículo que por su uso pueda estar en contacto con la piel que contenga dimetilfumarato tras detectar varios casos de aparición de eczemas -irritación de la piel- por contacto derivados de la utilización de esta sustancia como fungicida en el calzado, aunque su uso para tal fin está prohibido. El dimetilfumarato, según el Ministerio, se envasa en bolsitas y se inserta en los brazos, asientos o espuma de los sillones y en los envases de los zapatos, y su acción alergénica depende de la rapidez y la cantidad que puede salir de la bolsita e impregne el cuero del sofá, de la silla, del calzado o de cualquier otro producto que pueda estar en contacto con la piel.

La detección de este tipo de mercancia por parte de los agentes se ha convertido en algo común en los últimos meses. Precisamente por eso, Facua-Consumidores insistió en que se mejore la información denuncia que casi ninguna de las marcas afectadas siguen han desarrollado campañas de información para dar a conocer el problema a los consumidores.

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