Cuarenta de los 201 autobuses de la flota de Rober en Granada ya son de bajas emisiones: 6 eléctricos y 34 híbridos. La concejal de Movilidad en el Ayuntamiento de Granada, Raquel Ruz, ha presentado este miércoles dos nuevos autobuses, uno híbrido y otro eléctrico, que se suman al plan de renovación de la flota del transporte urbano, cumpliendo así con el compromiso dado para este año. Ahora, se encargarán nuevos autobuses ya para el año próximo, de los que se incluirán también nuevos minibuses para la Alhambra. Serán 28 autobuses más para el 2024, según ha detallado también el director de Alsa, Valeriano Díaz. De ellos, 18 vehículos nuevos irán para realizar el servicio en los barrios históricos, como son el Albaicín, Sacromonte y Realejo, mientras que los otros diez serán “cien por cien eficientes energéticamente”.

Ruz ha recordado también que los autobuses de Granada contarán con doble rampa de acceso para personas con movilidad reducida tras anunciar el Ayuntamiento de Granada el inicio de la instalación de una segunda rampa manual, que se sumará a una eléctrica, ya existente, de tal manera que “en caso de que falle la primera, el conductor desplegará la manual con lo que damos un paso más en la mejora del servicio que garantiza la accesibilidad universal”. Un cambio para el que ya se ha licitado el contrato tras quedar desierto en una primera convocatoria.

Ruz ha dicho que se invertirán más de 900.000 euros de fondos europeos, muestra del compromiso del gobierno municipal por mejorar la “eficiencia y calidad” del transporte público de Granada, del que ha recordado que es uno de los mejores de España. 

Según la concejal, el Ayuntamiento de Granada avanza así en su compromiso por mejorar la calidad del aire, del que ha subrayado que es “un problema que nos preocupa y nos ocupa”, con medidas que “requieren de un gran esfuerzo”. Los dos nuevos autobuses permitirán una reducción de emisiones de 30 toneladas de C02 a la atmósfera cada año.

Asimismo, ha recordado la aplicación por parte del Ayuntamiento de Granada, con la colaboración del Gobierno de España, de bonificaciones económicas para fomentar el uso del transporte público mediante una reducción del precio del billete de los diferentes abonos. “Este gobierno municipal, en un momento de crisis energética, dio un paso al frente y asumió este coste financiero, porque queremos que todo el mundo tenga la opción y elija el transporte urbano por ser el más cómodo y eficiente, pero también la forma más económica para los granadinos y granadinas a la hora de desplazarse por la ciudad”, ha afirmado.

Más sostenibles y con más calidad

El nuevo bus eléctrico, de doce metros de largo, marca Mercedes Benz, contribuye además a reducir la contaminación acústica en la ciudad gracias a la tecnología eléctrica el ruido tanto exterior como interior en este tipo de vehículos es prácticamente imperceptible.

Dotados de piso bajo integral accesible, cuentan con rampa doble manual-eléctrica y espacio para dos personas de movilidad reducida en silla de ruedas con tabla de apoyo y apoyo lateral, más otros cuatro asientos, en este caso con tapicería diferenciada, a la vez que están dotados de casquillos para personas invidentes en barras señalizando los asientos reservado y pulsadores de parda con indicación en braille.

Los usuarios del transporte público que se suban a estos vehículos dispondrán de cuatro tomas USB doble en habitáculo de pasajeros, a la vez que la iluminación interior es Led.

El sistema de recarga de los nuevos buses eléctricos rebaja drásticamente a cero la polución emitida a la atmósfera al utilizar un motor eléctrico impulsado por baterías embarcadas alimentadas por energía eléctrica, que a su vez al contar con un sistema especial se recarga con la energía producida en la frenada o la inercia de las retenciones, posibilitando mayor autonomía.