"Extraña". Así calificó ayer la secretaria general del PP de Granada, Luisa García Chamorro, la salida de Díaz Berbel del partido tras aclarar que la dura carta remitida por el ex alcalde a los medios de comunicación y a algunos compañeros de formación no ha sido acompañada de una petición formal de baja en el grupo popular.

Pese a no compartir la forma en que se produjo, Chamorro expresó su "respeto" a la decisión de un ex compañero que, al encontrarse en un estado democrático y de derecho, es libre de abandonar su antiguo partido si no encuentra en él motivaciones suficientes.

Para Díaz Berbel las cosas están muy claras. Anoche, ante la posición de incertidumbre expresada horas antes por miembros de la dirección del PP granadino, el exalcalde volvió a remitir un correo electrónico para solicitar su baja, otra vez.

En el escrito, Berbel se hacía eco de las declaraciones realizadas por García Chamorro en la sede del PP ante los periodistas e insistía en solicitar su desvinculación del grupo popular: "Mi querida amiga, creo que en pleno siglo XXI y cuando todos tenemos nuestro correo electrónico y la propia sede del partido así lo tiene, tal y como figura en su página web, es más que suficiente la comunicación de baja como militante de mi persona vía e-mail, pues asimismo está validado incluso ante los Tribunales de Justicia, por tanto no creo necesario recurrir a ningún otro procedimiento para que de una vez por todas se tramite mi baja como militante del Partido Popular. Por consiguiente insto a los responsables de comunicación del partido que tramiten dicha petición en toda regla".

Berbel, que había contestado por la mañana a las palabras de los populares granadinos en declaraciones a Granada Hoy, tomó con ironía las palabras de Chamorro y preguntó "si es que querían que les mandara un notario" para certificar su baja en el partido.

El que fuera alcalde de la capital y senador consideró que con el primer envío por correo electrónico de la carta al presidente nacional del PP, Mariano Rajoy y a Sebastián Pérez, presidente de la formación en Granada, era más que suficiente para certificar su intención de abandonar las filas populares.

Otro de los políticos que recibió su primer correo ha sido la persona que ha desatado la polémica esta Navidad en el PP nacional: Francisco Álvarez-Cascos. Según dijo, ya le ha contestado a su correo dándole ánimos y diciéndole que ha hecho "muy bien" con la presentación de su renuncia. La marcha del PP asturiano del que fuera ministro de Fomento ha sido precisamente una de los argumentos esgrimidos por el exalcalde para abandonar su partido.

Para Berbel -que considera la situación sufrida como "vejatoria, desagradecida e injusta"- los motivos de su adiós se encuentran en que "está en el partido para trabajar" y "no para recibir una publicación en su casa o ir de palmero cuando viene Mariano Rajoy a Granada". Su ilusión, por tanto, sigue siendo "figurar en una lista electoral con las personas que merezcan estar en ella" porque está dispuesto a volver a la primera línea de la política.

La valoración de la marcha de Berbel hecha ayer por Chamorro fue la primera realizada desde el PP de Granada, ya que tanto el actual alcalde como otros populares de la provincia han insistido en eludir opinar en uno u otro sentido. Sólo Javier Arenas se había pronunciado en su partido diciendo que "sentía la baja" pero que "desde hacía tiempo Díaz Berbel estaba desvinculado" del partido.