Juventud, ganas, música, comercio, Granada y Realejo. Todos esos elementos son los que se unirán durante los próximos fines de semana -viernes y sábados- en las calles del insigne barrio capitalino. Se trata de 'Insólito Festival', un evento que reunirá hasta ocho grupos de música locales que amenizarán la entrada a varios de los pequeños comercios realejeños, con conciertos "en vivo". El objetivo es dar "visibilidad" a ambos sectores granadinos y que las interpretaciones sirvan como aliciente para el consumo en los diversos establecimientos.

Miskins Ronson, Toulouse, Pájaro Jack, Fandila, We are robots, Plastik Frostik Machine, San Marcos y Brio Afín serán las agrupaciones que pongan las notas musicales. Ellas tocarán en tiendas tradicionales de, entre otras, la calle Molinos, la plaza del Realejo o la plaza de Fortuny.

Los principales artífices de la idea han sido el profesor de la Escuela Superior de Comunicación Audiovisual -ESCAV- Luis Fas y dos de sus alumnos: Miguel Villoslada y Ana Navarro. La iniciativa cuenta, además, con el apoyo del Ayuntamiento de Granada. "Miguel y Ana han conseguido vencer todas las adversidades que se les presentan a los jóvenes hoy ya que los proyectos no son fáciles y cuesta llevar a cabo las ideas; por el camino te encuentras muchos 'no'. Ellos han seguido sin descanso hasta encontrarse con el 'sí' que ansiaban", señaló el concejal de Juventud, Juan Francisco Gutiérrez. "Las ideas son muy importantes; sin ellas, las administraciones no podríamos apoyar", agregó la edil de Comercio, María Francés.

Los conciertos comenzarán ya este viernes 9 de mayo y se extenderán hasta final de mes. El folk, el rock and roll, el pop, el powerpop, el indie y la música electrónica serán los estilos que resuenen en las calles del célebre barrio. "Hemos elegido el Realejo porque es uno de los espacios más pintorescos de Granada, donde se mezclan muchas culturas diferentes", explicó Miguel Villoslada.

La actividad, de hecho, se circunscribe dentro de la asociación cultural Cultura Insólita, constituida a raíz de una de las asignaturas de la ESCAV. El profesor Fas, encargado de "tutorizar" todas las tareas, expuso cuál era la finalidad principal: "Es una práctica académica que se ha transformado en una vivencia real cuyo objetivo es promocionar la música granadina y los comercios realejeños más pequeños". La esperanza, asimismo, es que la de este año sólo sea la primera de muchas ediciones del festival y que éste pueda extenderse hacia otros distritos de la capital como el Albaicín o el Zaidín, que también fueron candidatos a acogerlo en un primer momento.