“Nosotros somos más austeros”. Ha sido la frase con la que Susana Díaz ha comenzado su encuentro con militantes en Vegas del Genil ante un reducido auditorio, entre los que estaba la exdelegada del Gobierno Sandra García, en una sala más pequeña que cualquier despacho oficial, en contraposición al acto celebrado el domingo por Juan Espadas en el Paseo del Salón. Pero Susana Díaz, que conoce al dedillo las agrupaciones y a los militantes, que son los que votan, ha empezado una campaña de perfil bajo que el martes continúa por Moclín y Las Gabias. Y desde luego sin el desembarco de diputados o parlamentarios que su gran rival desplegó el domingo.

La precandidata a las primarias del PSOE andaluz ha apelado también, como Espadas, a la unidad en un proceso que dice afrontar “libre de equipaje y sin ataduras” y con el deseo de hacer del PSOE de Andalucía un partido “abierto, sin que nadie se imponga a nadie ni se señale a nadie por decir lo que piensa y en qué cree”.

Susana Díaz ha apelado a la unidad en un proceso que dice afrontar "libre de equipaje y sin ataduras" y con el deseo de hacer del PSOE de Andalucía un partido "abierto, sin que nadie se imponga a nadie ni se señale a nadie por decir lo que piensa y en qué cree".

Durante un acto con la militancia celebrado esta tarde en Vegas del Genil, en el que ha estado acompañada por el alcalde y secretario general de esta localidad, Leandro Martín, Díaz se ha mostrado dispuesta a "ponerle las luces largas a este partido, primando el mérito y la capacidad".

"Vivo estas primarias con ilusión, libre de equipaje y sin ataduras. Sé lo que quiero hacer, con recetas de presente y de futuro", ha manifestado tras asegurar que el PSOE es la esperanza para proteger la sanidad y la educación pública en Andalucía.

Para ello, ofrece "compromiso, trabajo y cariño" con "lealtad" a su partido y con la "unidad" que, dice, "siempre" ha ejercido y ejercerá cuando pasen las elecciones.

"Tenemos por delante un horizonte de esperanza, sin tutelas y sin peajes, y quiero hacerlo con todos vosotros" ha declarado.

En su opinión, para que la gente vuelva a confiar en el PSOE es necesario acometer cambios que empiecen "desde abajo, desde la voz del militante y desde la agrupación local".

Ha desdeñado "los halagos y el amiguismo", frente a los que ha defendido "el talento, el mérito y la entrega", y ha recordado que tras las pasadas elecciones andaluzas, en las que el PP accedió al gobierno de la Junta con el apoyo de Cs, decidió quedarse en Andalucía en lugar de irse "a otro sitio".

"No quería cargos, sino quedarme en la oposición para patearme las calles y escuchar a los militantes", ha incidido.

La secretaria general del PSOE andaluz ha dicho que este es un partido "libre, abierto, plural y sin represalias. Pero también un partido autónomo, por eso en Andalucía deciden los andaluces".

Se ha referido a lo ocurrido en las elecciones de Madrid para señalar que el PSOE debe representar un proyecto "nítidamente de izquierdas", porque solo así mandarán un mensaje "claro".

Lo que presenta como precandidata a las primarias del PSOE andaluz para sacar a Juanma Moreno de la presidencia de la Junta, ha dicho, es "un cambio de forma, de fondo, de modelo de partido, un partido en el que los dirigentes nos pongamos al servicio de los militantes, y no al revés".

Díaz ha apelado a su recorrido y trayectoria como presidenta de la Junta, que le ha dado "la experiencia de saber lo que hay que cambiar y la libertad para hacer esos cambios".

Ha pedido a los socialistas andaluces que "despierten de la oposición" pero sintiendo sus "valores".

"Y hay que hacerlo con el talento que tenemos, porque en nuestro partido cabe todo el mundo", ha concluido