Los retrasos del Metro de Granada provocaron ayer un duelo de acusaciones entre los partidos políticos, incluso, del mismo signo. El alcalde de Granada, Paco Cuenca, pidió ayer a la Junta de Andalucía celeridad para resolver los escollos de cara a poner en marcha, de una vez, el transporte. "Se debe resolver de una vez por todas, todos los problemas técnicos que hay" y "no dar más vueltas con la fecha" para la activación con pasajeros del Metro y que, "lo antes posible", terminen esta infraestructura que tendrá "beneficios en materia de movilidad pública para todo el Área Metropolitana y que va a eliminar problemas de contaminación pues presenta emisiones cero".

En este sentido, el consejero de Fomento de la Junta de Andalucía, Felipe López, precisó que la Junta está trabajando en la finalización de la obra, toda vez que "la infraestructura está terminada y ahora está en la tarea de ver cómo el Metro recupera algunas de las infraestructuras que se han construido pues tenemos algunas dificultades de invasión de la vía por diferentes usos, ajenos a la necesidad de que el metro circule por allí". "Por razones de calidad en el servicio en el desplazamiento y por razones de seguridad para los usuarios de otros medios de transporte hay que mejorar esos aspectos, pues esos usuarios deben convivir con 57 intersecciones a lo largo de los 13 kilómetros del metro, pero estamos en la antesala de la puesta en marcha", añadió.

El portavoz del grupo municipal de Ciudadanos, Manuel Olivares, acusó de "ineptitud y falta de previsión" a la Junta por el Metro que según indicó, va a sumar un "undécimo" retraso para la fecha de su estreno con pasajeros.