Un nombre de usuario y una secuencia alfanumérica son los requisitos necesarios para que los padres conozcan la realidad educativa de sus hijos. Saber si el niño acude a clase con los deberes hechos, conocer las calificaciones que tiene en cada una de las asignaturas o ser los primeros en enterarse si algún día hace novillos es ahora más fácil gracias al programa informático de seguimiento educativo Pasen.

En Granada, según la Consejería de Educación, son noventa y seis los centros que ofrecen a los padres la posibilidad de tener claves de acceso para estar puntualmente informados del día a día del alumno. Hasta la fecha, Educación calcula que 67.706 padres granadinos disponen de estos privilegios de entrada, una herramienta informática de última generación que ha llegado a la Educación procedente de otras disciplinas en las que ya se utilizaba. Pero las bondades de este programa no sólo se encuentran en poder visualizar datos sino en el "interactuar" con los profesores. Precisamente, esta necesidad fue una de las razones por las que nació Pasen.

La imposibilidad que tenían algunos padres de acudir a reuniones o tutorías por razones laborales hizo tener que plantearse alternativas de contacto nuevas. "Había que evitar la incomunicación educativa entre el colegio y la familia", explican desde la consejería. Por eso, el programa no es cerrado sino que tanto profesores como padres pueden estar en contacto a través de la web. "Los padres pueden ver los comentarios que el profesor escribe sobre el niño en su ficha particular, los consejos e, incluso, en algunas asignaturas las tareas que tiene", comentan. A su vez, los padres pueden responder esos comentarios, aclarar futuras ausencias o solicitar un encuentro posterior con el profesor.

Especialmente significativo es el uso que este sistema tiene dentro de los centros de secundaria. Desde que se pusiera en marcha hace dos años, Pasen se ha convertido en una de las herramientas más firmes contra el absentismo escolar. Se da la circunstancia de que la etapa de Secundaria es la más sensible a las faltas de los jóvenes y a la pérdida de contacto con los profesores, de ahí, que la administración se intente implantar y dar a conocer en estos centros. "El problema del absentismo es grave y lo preocupante es que los padres, siempre, son los últimos que se enteran de esta realidad", apuntan desde Educación.

Tan sólo en el pasado curso, en Granada se detectaron 1.192 casos de absentismo, una cifra que desciende en relación a años anteriores pero que esconde datos como los cerca de setenta abandonos escolares que se han producido, por ejemplo, en la Zona Norte. Desde la delegación se intentan tomar medidas que impliquen a los padres en esta realidad, "ya que tan responsable son los profesores, como los padres y como los alumnos", sentencia.

Precisamente, porque los alumnos tienen mucho que decir en estos temas también pueden introducirse en el programa y utilizarlo como agenda, informarse de las últimas noticias relacionadas con el mundo de la Educación e incluso buscar manuales que les puedan ser de utilidad para sus asignaturas.

Los centros que cuentan con estas medidas de control, que en ningún caso buscan ser represoras, manifiestan que gracias a la informática han podido conectar con padres que nunca lo habían hecho o desvelar situaciones ocultas y desconocidas para algunas familias. A pesar de todo, insisten en la necesidad del contacto directo con los padres como mínimo una vez al trimestre.