Un buen indicador de cómo han cambiado las cosas en el sector inmobiliario es el tiempo en el que un propietario tarda en 'colocar' su vivienda. Al cierre del año 2017, este plazo se había reducido hasta los 8,8 meses, un signo inequívoco de la reactivación de la demanda, que cuenta ahora con mejores posibilidades económicas y mayor acceso a la financiación para poder adquirir una vivienda, ya sea de nueva construcción o de segunda mano.

El dato está recogido en el último Informe de Mercados Locales elaborado por la tasadora Tinsa. Y se trata de una cifra mucho más corta que la que se registraba un año antes. Al cierre de 2016, según el estudio publicado en su día por la compañía, el tiempo medio para vender una vivienda en la provincia alcanzaba los 10,4 meses. Es decir, que en apenas un año -eso sí, un año clave para el sector inmobiliario-, el tiempo que tiene que esperar un propietario para encontrar comprador se ha reducido un 15,4%.

La situación en Granada, de hecho, se encuentra en la parte positiva de la tabla nacional. Un propietario de la provincia tarda casi la mitad de tiempo en vender una vivienda que uno de Cantabria, donde el plazo medio se alarga hasta los 16 meses. Aunque la media es bastante más positiva en Ceuta (3,2 meses) o Madrid (4), Granada se encuentra entre 17 provincias españolas donde menos se demora el proceso de compraventa. En Andalucía ocupa el cuarto puesto, por detrás de Jaén (7,4), Málaga (7,6) y Sevilla (8,2). Mejora, eso sí, los plazos de Cádiz (9,4), Córdoba (9,4) y Huelva (9,5).

El informe de Tinsa también indica cuál es el nivel de compromiso económico que requiere para un granadino la compra de una vivienda con financiación. La hipoteca media en la provincia se situó al cierre de del tercer trimestre de 2017 en 86.963 euros, lo que supone una cuota mensual (el pago que, de acuerdo al coste financiero medio vigente, afronta el tomador de una hipoteca) de 406 euros.

Pues bien, con estos datos, Tinsa concluye que el esfuerzo financiero que exige a los granadinos la compra de una vivienda es del 16,4%. Es decir, este es el porcentaje de los ingresos familiares que se destinan al pago del primer año de hipoteca. El dato es bastante revelador. Ya sea por el precio de la vivienda o por los bajos salarios de los ciudadanos, Granada se sitúa entre las diez provincias españolas en las que los consumidores tienen que 'hipotecar' mayor porcentaje de sus ingresos.

Granada comparte la parte alta de la lista (en este caso negativa) junto a Orense (16,6%), Córdoba (16,6%), Girona (17%), Sevilla (17%), Pontevedra (17,2%), Ceuta (17,4%), Barcelona (17,6%), Málaga (21,7%) y las Islas Baleares (22,3%). Las únicas provincias andaluzas que mejoran los datos de Granada, aunque no se alejan mucho, son Almería (16,1%), Jaén (16%) y Huelva (16%). Cádiz exige el mismo porcentaje que Granada, un 16,4%.

El dato que arroja la provincia dista mucho del que registran Soria o Teruel, que apenas exigen a los compradores de vivienda que destinen un 12,6% de su salario y sus ingresos para poder acceder al mercado inmobiliario.