Un cuarto de siglo de escándalos en el club

Espías, robos y bolsas de basura: dos décadas cargadas de polémica en el Granada CF

  • Durante los últimos años la entidad rojiblanca ha protagonizado diversos escándalos que han llenado las páginas de Sucesos

  • El caso del 'espionaje', que se está investigando, ha sido el último que ha estallado en la órbita del club

Agentes de la UDEF registran Los Cármenes y la Ciudad Deportiva tras estallar la Operación Líbero en la que fue detenido Quique Pina

Agentes de la UDEF registran Los Cármenes y la Ciudad Deportiva tras estallar la Operación Líbero en la que fue detenido Quique Pina / Álex Cámara

De la venta del antiguo estadio Los Cármenes en 1995 al espionaje de hace unos días. Todo ello pasando por el descenso administrativo, los impagos que derivaron en el encierro de los jugadores, el dinero en bolsas de basura tiradas al contenedor, el robo en la recaudación de las taquillas, la amenaza de 'exilio' a otra provincia, los 'maletines' de Quique Pina, el virus informático tras la venta del club a Jiang Lizhang o los registros durante la Operación Líbero el pasado mes de enero. Dos décadas de fútbol que también han estado cargadas de polémicas extradeportivas que han marcado nuevos capítulos en la historia del Granada CF.

El último, el que se abrió a principios de semana, como publicó Granada Hoy: el espionaje. Los directivos del Granada CF descubrieron que había ciertas cámaras y micrófonos que ellos desconocían ubicados en despachos y zonas. Una red de 'espionaje' que habría estado monitorizando de forma remota los movimientos de los actuales dirigentes del Granada CF, tanto en Los Cármenes como en la Ciudad Deportiva, así como la sospecha de que se hubiesen clonado ordenadores de la entidad. Todo ello hasta tal punto, en el que la entidad puso en conocimiento del cuerpo técnico y la plantilla del primer equipo lo ocurrido, antes de que se jugase el encuentro del pasado domingo ante el Numancia, ya que ellos también podían haber sido espiados.

Tras el hallazgo, que se produjo hace aproximadamente un mes y que hace unas semanas se puso en conocimiento de la Policía Nacional y se inició una doble investigación –interna y externa–, como indicó el club el lunes a través de un comunicado en el que afirmó que se habían encontrado "determinados dispositivos" en sus oficinas. En concreto, en los despachos de altos cargos como el del gerente deportivo, Fran Sánchez, o el director general, Antonio Fernández Monterrubio.

En la investigación externa, que corre a cargo de la Policía, esta semana se ha llamado a declarar a varias personas en calidad de testigo y se ha enviado un atestado al Juzgado de Instrucción número 7 para la posible apertura de diligencias.

Mientras que en la interna, las medidas tomadas por el Granada CF fueron el despido del informático y del jefe de seguridad. ¿Los motivos? Que las cámaras se controlaban a través de un remoto vía wifi –por ello se han cambiado las claves de todas las redes del club–; que el informático no fichaba, tampoco tenía control de horario, trabajaba tanto en Los Cármenes como en la Ciudad Deportiva y en numerosas ocasiones se quedaba en las dependencias del club más allá de lo que debía ser su jornada; y que el jefe de seguridad era quien tenía, pese a ello, el control de quienes salían y entraban en dependencias del club en todo momento.

Estas dos personas, que llegaron al club en la etapa de Ángel González Segura como director de Operaciones e Infraestructuras del club, en 2016, se habían convertido en trabajadores de confianza de la actual directiva. Sin embargo, de confirmarse esta trama de espionaje y que fuesen ellos quienes estuviesen detrás de la misma –será la investigación policial y, en su caso, también judicial, la que determine quiénes son los autores– no sería la primera vez que ocurre algo así en la nueva era del club con Jiang Lizhang al frente.

A los pocos días de la compra del Granada CF por el dirigente chino, se descubrió un topo en el sistema informático. Fue en julio de 2016 cuando el Consejo Superior de Deportes envió a un equipo de auditores para analizar las cuentas del club y se encontraron con que el sistema de contabilidad y facturación estaba afectado por un virus. En concreto, la red había sido infectada unos días antes a través de un acceso remoto por el usuario ‘Italia’, que correspondería a un encargado de la contabilidad del club Udinese Calcio, propiedad de la familia Pozzo.

En julio del 2016 se detectó un virus espía en el sistema informático del club

Otro escándalo más entorno al Granada CF que destapó este diario en febrero de 2018 cuando saltó la Operación Líbero, en la que la UDEF de la Policía Nacional registró las dependencias de la entidad nazarí. Todo ello mientras el expresidente rojiblanco, Quique Pina, era detenido en su domicilio acusado de presunto fraude a la Hacienda Pública, blanqueo de capitales e insolvencia punible, como líder de un entramado de negocios en el mundo del fútbol que podrían ser fraudulentos, actuaciones que habría llevado acabo mientras dirigía el Granada CF.

Esto se traducía en que la 'era gloriosa' del club quedaba bajo sospecha. Pero, aunque fuese el mayor escándalo en torno al club, tampoco era el primero de la etapa de Quique Pina con el que se empañaba la imagen del Granada CF.

Los famosos 'maletines' de Quique Pina fueron otra polémica que saltó a la palestra en la temporada 2015-2016. La Liga de Fútbol Profesional investigó una serie de partidos que podrían haber sido amañados, entre ellos el que se jugó en Los Cármenes entre el Granada CF y la UD Las Palmas, en el que los rojiblancos lograron remontar un 0-2  que más tarde les benefició a la hora de conseguir la permanencia en Primera División. Si bien, finalmente no se pudo demostrar que en este envite hubiese alguna evidencia para determinar que hubiese sido amañado.

Los aficionados se concentraron en la Plaza del Carmen contra el posible ‘exilio’ del Granada CF a otra provincia Los aficionados se concentraron en la Plaza del Carmen contra el posible ‘exilio’ del Granada CF a otra provincia

Los aficionados se concentraron en la Plaza del Carmen contra el posible ‘exilio’ del Granada CF a otra provincia / G. H.

Otro de los 'líos' del Granada CF que saltó al panorama nacional fue el exilio con el que amenazó Quique Pina, cuando no se llegaba a un acuerdo con el Ayuntamiento, para la gestión del estadio de Los Cármenes. En un principio, ni desde el Consistorio se daba el brazo a torcer, ni tampoco desde la directiva del Granada CF, lo que provocó que hubiese incluso una concentración protagonizada por aficionados en la Plaza del Carmen en septiembre del 2012, para pedir una solución.

Unos años antes, en 2011, el Granada CF sufrió otro escándalo relacionado con la seguridad: el robo de la recaudación de las taquillas. El por entonces jefe de seguridad del club fue condenado a dos años de prisión, así como al pago de una indemnización de más de 130.000 euros por haber sustraído el dinero de la taquilla correspondiente al encuentro entre el Granada y el FC Barcelona.

No hay que echar mucho la vista atrás desde este episodio, para encontrarse con otra polémica: las bolsas de basura con dinero. En verano de 2010, los trabajadores de la empresa municipal de limpieza Inagra tuvieron que rescatar bolsas de basura de contenedores, en las que "por un despiste", según Quique Pina, había dinero de la campaña recién terminada en Segunda División, en la que el Granada CF había conseguido el ascenso a la máxima categoría del fútbol español.

Una de las sesiones del juicio por la venta del estadio Los Cármenes que tuvo lugar en 1995, y cuyo embrollo judicial se alargó hasta 2008 Una de las sesiones del juicio  por la venta  del estadio Los Cármenes que tuvo lugar en 1995, y cuyo embrollo judicial se alargó hasta 2008

Una de las sesiones del juicio por la venta del estadio Los Cármenes que tuvo lugar en 1995, y cuyo embrollo judicial se alargó hasta 2008 / G. H.

Hace diez años, se cerraba otro capítulo polémico que se inició en 1995 a raíz de la venta del antiguo estadio de Los Cármenes. Los directivos, entre ellos el que fuese presidente del Granada CF, Cándido Gómez, fueron juzgados por supuesta estafa al haber presuntamente alterado el precio, delito del que finalmente fueron absueltos en 2008. Trece años de periplo judicial en el que los directivos que fueron pasando durante esos años se acogían a la confianza en que el club ganaría esa batalla y se recuperaría un dinero que se invertiría en la entidad.

Los jugadores arrodillados durante el partido ante el Melilla en 2009 Los jugadores arrodillados durante el partido ante el Melilla en 2009

Los jugadores arrodillados durante el partido ante el Melilla en 2009 / G. H.

Ese mismo año, en 2008, la plantilla del Granada CF, por entonces dirigido por Paco Sanz, emitió un comunicado para denunciar que la entidad le adeudaba varios meses, una situación que desembocó en el sonado 'arrodillamiento' protagonizado por los jugadores del primer equipo en enero de 2009, en el encuentro ante el Melilla.

Viajando un poco más en el tiempo, también se vivieron situaciones insólitas a nivel extradeportivo. Los impagos durante la etapa de Pedro Ruiz, que desembocaron en el encierro en 2004 de los jugadores en Los Cármenes, cuando el club estaba en Tercera; la manifestación 'no autorizada' que reunió a cientos de granadinistas y que colapsó el centro de Granada; el descenso administrativo a dicha categoría dos años antes, con Francisco Jimena al frente, por aquellos 30 millones de pesetas que no se consiguieron reunir de ninguna forma.

Los jugadores en 2004 acabaron encerrándose en Los Cármenes como protesta Los jugadores en 2004 acabaron encerrándose en Los Cármenes como protesta

Los jugadores en 2004 acabaron encerrándose en Los Cármenes como protesta / G. H.

Mientras que unos años antes, en la temporada 1999-2000, la famosa del murcianazo del 25-J –el club se quedó a las puertas del ascenso tras caer ante el Real Murcia–, también con Francisco Jimena al frente, se produjo otro encierro por impagos.

Además, el sinfín de asambleas de socios cargadas de polémica, en las que se aprobaron gestiones que no estaban claras y que también han supuesto diversas manchas en torno al club.

Así ha sido, el último cuarto de siglo de vida del Granada CF, un club que a sus 87 años, arrastra una serie de capítulos insólitos. Pese a que con el último, el del espionaje, aún habrá que esperar para conocer finalmente se confirman o no las sospechas del club, lo que sí está claro es que se trata de otro episodio más para la historia de un Granada que, como ya parece estar acostumbrado, vuelve a ser señalado por asuntos extradeportivos.

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