Con las elecciones generales a la vuelta de la esquina, el director de Cáritas diocesana de Granada, Javier de Benavides, aprovechó para remarcar las necesidades sociales que tiene la provincia. "Hacemos un llamamiento a toda la sociedad y en especial a los representantes políticos para trabajar juntos en la erradicación de la pobreza", dijo de Benavides que destacó cuatro reformas concretas fundamentales para conseguir este complejo objetivo y que abarcan áreas como salud, vivienda y empleo.

En primer lugar, de Benavides instó a las administraciones a favorecer que todas los hogares en situación de pobreza tengan garantizados unos ingresos mínimos. Por otra parte, pidió reformas estructurales que garanticen el derecho a una vivienda digna, empleo y salario justo pero también apostar por la economía social y solidaria. "Hay que poner a las personas en el centro de cualquier modelo de desarrollo y emplazar a las administraciones públicas a que asuman su responsabilidad de mantener el estado social de bienestar con los recursos suficientes", dijo de Benavides, que recordó que la pobreza "nos compete a todos". "Los pobres no son solo de Cáritas por tanto ahora es el momento de optar por una sociedad donde salud, el bienestar social o la vivienda estén garantizados para todos; de construir una economía que ponga en el centro a la persona y no descarte a los más pobres y asumir estilos de vida sencillos y hábitos de consumo responsable respetuosos con el medio ambiente así como trabajar por una iglesia por y para los pobres", remarcó el director de Cáritas.

Durante la presentación de la Memoria 2015, De Benavides incidió en la importancia de los socios para el desarrollo de su actividad ante un panorama político de incertidumbre que puede redundar negativamente en las subvenciones. Por eso, Cáritas se apoya fundamentalmente en las donaciones que realizan los socios. "Queremos seguir haciendo captación de socios en previsión de lo que pueda suceder en un futuro políticamente incierto", destacó.

Por otra parte, también dijo que gracias a los fondos IRPF aportados por los contribuyentes a través de las casillas solidarias de la asignación tributaria en su declaración de la renta, Cáritas ha podido invertir 760.000 euros en diez proyectos de promoción y ayudas económicas de las que se han beneficiado 1.200 personas.

La organización cuenta con una quincena de programas de acción social que van desde animación a territorios, catering social/economato, ropero y servicio jurídico, infancia y juventud/comunidad gitana, mujer, mayores, personas sin hogar, discapacitados y mayores, adicciones, empleo, economía social, inmigración o cooperación internacional entre otros. La mayoría de las atenciones se han realizado a través de la acogida y asistencia en Cáritas parroquiales (7.657) aunque también destacan las acciones centradas en empleo.

En la presentación de la memoria también estaba presente el delegado diocesano Alfonso Marín que remarcó la importancia del salario emocional que reciben todas las personas que colaboran con la organización "Creemos en la dignidad de las personas. Para nosotros es un privilegio ser, estar y trabajar en Cáritas. Los voluntarios no cobran nada pero todos se sienten pagados y recompensados con lo que hacen y lo que son", dijo Marín que explicó que el hecho de estar junto a las personas, sacarles una sonrisa, o suscitar un rayo de esperanza, a través de la mediación de los voluntarios "nos hace sentirnos satisfechos y sentir que es un privilegio estar en esta organización". Por último, afirmó que tras las cifras que la memoria pueda barajar: "Hay personas con un rostro concreto e historias de sufrimiento".