Junio ha sido un mes raro para el mercado de trabajo de Granada. Positivo, porque por tercer mes consecutivo el desempleo ha dado un respiro y las colas del Inem se han reducido en 308 personas, pero raro. En Granada, pese al comportamiento del resto del territorio nacional, el sexto mes del año nunca ha sido especialmente bueno para el empleo. Hasta que comenzó la crisis, los datos que cada mes de junio ofrecía el Servicio Público de Empleo Estatal apuntaban un crecimiento del desempleo. Según la serie histórica, en junio de 2005 el paro creció en 372 personas; en 2006, aumentó en 87; en 2007 se sumaron al desempleo 1.009 personas; y en 2008 lo hicieron 2.375. Todo cambió en 2009, cuando mes de junio trajo a Granada un descenso del desempleo de 6 personas. Desde entonces, el comienzo de la temporada alta oficial siempre ha conllevado buenas noticias para Granada. 

Lo extraño es que en 2010 el desempleo cayó en más de medio millar de parados (547, para ser exactos) y que este verano, el que precederá a la recuperación del mercado laboral, según las autoridades gubernamentales, apenas han salido de las listas del desempleo 308 granadinos. 

Aún menos usual es el sector que ha permitido un nuevo descenso del desempleo en la provincia. Al contrario que en los meses anteriores, cuando el sector servicios ha sido el que ha marcado la diferencia, en junio de 2011 esta actividad únicamente ha sacado a 40 personas del desempleo. La industria también ha aportado su modesto grano de arena, ya que 60 trabajadores en paro procedentes de este sector han encontrado su hueco en el mercado laboral. Pero la auténtica responsabilidad del descenso del desempleo en un mes en el que la construcción ha sumado 25 parados y la agricultura 198 por la finalización de algunas campañas, es del colectivo sin empleo anterior. Es decir, de las personas que se apuntaron a las listas del paro con la esperanza de encontrar su primer puesto de trabajo. En el mes de junio, 431 demandantes de empleo sin experiencia laboral consiguieron su primer empleo. El grueso de estos 'afortunados' lo formaron jóvenes de entre 20 y 29 años -concentran el 96% del descenso del desempleo en el colectivo-, lo que podría indicar quizá un éxito moderado del plan de choque puesto en marcha por el Gobierno central para la contratación parcial de jóvenes parados de larga duración. Y, aunque la estadística no incluye el sector en el que han encontrado empleo, tanto la fecha como la estructura del tejido productivo de Granada indica que un elevado porcentaje ha podido recaer en el sector servicios.

En cualquier caso, tanto los sindicatos como los empresarios coinciden en que los datos que arroja la estadística del paro registrado son insuficientes. El presidente de la Confederación Granadina de Empresarios (CGE), Gerardo Cuerva, advirtió que los datos, aunque positivos, son peores que los de hace un año, "lo que demuestra que la situación económica no está mejorando como debía". Así que el presidente de la patronal no dudó en señalar que las cifras "no invitan al optimismo", sobre todo porque el sector que tradicionalmente 'tira' de la economía provincial, el servicios, sólo ha disminuido en 40 personas. "Confiemos en que en los meses que quedan de verano los datos sean más positivos, porque la realidad hoy por hoy es que la mejoría económica que muchos predican es falsa".

El secretario general de CCOO de Granada, Ricardo Flores, ahondó más y apuntó que la caída del desempleo no sólo es inferior a la del año pasado, sino que, además, "es totalmente coyuntural". Flores mostró su preocupación por el hecho de que en "plena campaña de verano y rebajas la creación de empleo en el comercio y la hostelería es inexistente, a pesar de que las variables económicas son buenas".

Por su parte, la secretaria general de UGT de Granada, Manuela Martínez, apuntó que "la clave para crear empleo no puede ser la situación puntual del turismo, sino la recuperación de la actividad económica y, para ello, es necesario modificar la estructura productiva hacia otros sectores".