El entrenador del Granada CF, Diego Martínez, compareció tranquilo en su primera rueda de prensa previa a un partido oficial como preparador rojiblanco. Como es habitual en él, ante los micrófonos se mostró sincero y convincente, enumerando casi sin parar todas las virtudes que quiere que tenga su equipo, tanto en Elche como a lo largo de la temporada. Volvió a advertir de las diferencias entre el cuadro nazarí y otros oponentes más potentes, del inconveniente que supone no tener la plantilla cerrada y de la dificultad extra que tiene medirse a un recién ascendido, aunque confía plenamente en los suyos y en las ganas que tienen. Habló, como parece que va a ser habitual durante el curso, antes de ofrecer la lista de convocados para el partido.

Martínez indicó que el éxito de este Granada es "sólo ganar el siguiente partido" y que no se plantea "lo que pueda pasar en junio", y menos en Segunda y con 21 rivales tan potentes enfrente y cuando aún "no está cerrada la plantilla", lo que calificó como "un gran inconveniente".

Los primeros partidos son raros, con fases buenas y malas, no hay automatismos ni hábitos consolidados"

El preparador rojiblanco calificó el choque ante el Elche como "especial", al ser "el primero de un proyecto ilusionante", y vaticinó que el duelo será "diferente" al que ambos equipos disputaron en esta pretemporada y que acabó 0-0.

"Los primeros partidos son raros porque el soporte físico colectivo no te da y se tienen que buscar otros caminos, y tampoco hay hábitos ni automatismos consolidados. Son partidos con fases buenas y malas para todos los equipos", apuntó.

"Lo importante es saber sufrir cuando nos toque, no regalar cosas y ser capaces de tener concentración para ser competitivos en todas las facetas del juego", agregó el preparador gallego, quien también advirtió de la buena dinámica de un recién ascendido como el Elche, pues "los equipos que vienen de ascender tienen unas inercias positivas que suman a su favor".

"El Elche va a sacar un once inicial con ocho o diez jugadores que repiten del año anterior, mientras que nosotros estamos aún en el proceso inicial, intentamos sumar variantes y rasgos que nos identifiquen como equipo", explicó.

Martínez pidió a los suyos "ser un equipo organizado en defensa y en ataque, hacer daño al rival con balón y recuperar lo más arriba y lo más rápido posible cuando se pierda", además de intentar ser un conjunto "valiente, alegre, dinámico y contundente en ataque", algo que reconoció le ha faltado al Granada "en pretemporada".

"También hay que tener buena nota en el balón parado, en la gestión de los últimos minutos, no dimitir del partido y construir nuestra mentalidad. Queremos llegar a ser eso y aún no lo somos, es un proceso largo", sentenció.

El joven entrenador reconoció que aún no sabe con qué sistema va a estar más cómodo o va a rendir mejor el equipo y que en estos primeros partidos va a intentar "aprovechar a la gente que está con más chispa, con un punto más de confianza" sabiendo que "hay que intentar sumar rasgos y variables que nos identifiquen como equipo" y que el objetivo final es "dominar diferentes formas de jugar tanto en dibujo como en perfil de jugadores que pueden estar en ese dibujo, y consolidar todas las variables".

Sobre el centrocampista Fede San Emeterio, traspasado por el Sevilla al Valladolid y cedido por este club al Granada, dijo que es "como el cemento de los equipos", ya que se trata de "un buen jugador de equipo que puede sumar en el juego aéreo, un buen recuperador, joven, con proyección y con buena mentalidad competitiva".