En el Granada CF sólo existe un rumbo. Todos los mimbres de la entidad rojiblanca transitan por el mismo camino sin existencia de disidencias. Diego Martínez aterrizó en el club con un discurso que ha mantenido en las duras y en las maduras. Tras dos temporadas de éxitos, las consignas del técnico gallego impregnan todas las estancias del club, desde los directivos hasta los jugadores. Las palabras y la actitud de Luis Milla en su presentación como granadinista mostraron que la filosofía de Diego Martínez empapa como la lluvia fina.

Todos a una, como en Fuenteovejuna. La unidad del Granada CF no es ninguna sorpresa a estas alturas de la película. La presentación de Luis Milla como futbolista rojiblanco fue otra demostración de que las incorporaciones deben alinearse rápidamente con los valores de la entidad octogenaria. El ex de Fuenlabrada habló muy poco sobre sus cualidades sobre el verde, pues la mayoría de sus palabras fueron dedicadas al objetivo de “sumar” y “empujar” junto al resto del equipo para conseguir los objetivos. El madrileño se deshizo también en elogios para el vestuario al que ya pertenece, ya que alabó en varias ocasiones el trabajo realizado por sus nuevos compañeros en el pasado curso.

Las declaraciones de Antonio Fernández Monterrubio y Fran Sánchez fueron por la misma dirección. El director general rojiblanco aludió varias veces al término “familia” y a la importancia que se le da dentro del club. El director deportivo, por su parte, habló sobre su trabajo para mejorar las prestaciones de la plantilla, pero rápidamente halagó al vestuario que ha hecho historia metiendo al Granada en Europa.

Luis Mila durante su presentación como jugador rojiblanco

La actitud de Luis Milla no es una novedad en las incorporaciones realizadas. Los fichajes acometidos en el pasado mercado estival llegaron también con el discurso aprendido. Veteranos bien curtidos como Roberto Soldado o Gonalons aprendieron rápido las consignas del pasito a pasito y la importancia de trabajar para sumar al colectivo.

La capacidad de Diego Martínez para implicar al máximo a todos sus efectivos se ha visto a lo largo de la temporada 2019-20. En ocasiones, algunos jugadores pasaban semanas sin entrar en los planes del entrenador rojiblanco, pero cuando les tocaba participar entraban con una actitud ejemplar.

El mercado de fichajes acaba de levantar su persiana y quedan movimientos por realizar, pero es más que seguro que los futbolistas que lleguen al Granada CF se empaparan con rapidez del alegato que todo el club defiende a capa y espada.