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La magia de Josep Pons

Obras: Gustav Mahler, Sinfonía núm. 3 en Re menor, 2º movimiento (Arreglo de Benjamin Britten); Lluís Vidal, Concierto para quinteto de metales y orquesta; Robert Schumann, Sinfonía núm. 2 en Do mayor op. 61. Spanish Brass Luur Metalls: Juanjo Serna, Carlos Benetó, Manuel Pérez, Indalecio Bonet y Sergio Finca. Orquesta Ciudad de Granada. Director: Josep Pons. Lugar: Palacio de Congresos. Fecha: 26 de febrero de 2010.

La Orquesta Ciudad de Granada recibió con alegría y entrega a Josep Pons, quien fue su director titular durante toda una década. El feliz reencuentro fue motivo de satisfacción también para el público, que pudo asistir a uno de los mejores conciertos de la temporada. En el programa figuraban tres obras sumamente sugerentes: de Mahler se programó el segundo movimiento de la Sinfonía núm. 3, de Schumann su Sinfonía núm. 2 y como plato fuerte de la velada figuró el estreno en Granada del Concierto para quinteto de metales y orquesta de Lluís Vidal.

Las bondades y calidad artística de la Sinfonía núm. 3 de Gustav Mahler son bien conocidas por el gran público; la que fuera la sinfonía más larga del autor se ha convertido en una de sus obras más valoradas, si bien su puesta en escena suele resultar compleja por el despliegue de medios requeridos. Posiblemente esta dificultad estuvo en la mente de Benjamin Britten, gran conocedor y admirador de la obra de Mahler, cuando realizó un arreglo para pequeña orquesta del segundo movimiento de aquella sinfonía, que lleva como sobrenombre Lo que me cuentan las flores del campo. Respetando la esencia del original, Britten perfiló la escritura mahleriana en un movimiento en el que podemos encontrar la gracilidad melódica de Mahler y su carácter bucólico. Josep Pons acometió con certeza la interpretación de este movimiento, encontrando el preciso equilibrio entre las cuerdas y los vientos, tan necesario en Mahler. La orquesta sonó brillante, optimista y tremendamente evocadora, en una versión de la obra que rayó la perfección.

Tras esta vista hacia lo que la naturaleza nos transmite, el Spanish Brass Luur Metalls apareció en escena para interpretar la parte solista del Concierto para quinteto de metales y orquesta de Lluís Vidal. Este concierto, escrito para Luur Metalls, se estrenó apenas hace un mes en el Auditorio Nacional de Madrid, siendo ésta la segunda audición de esta obra a nivel mundial. La obra aúna elementos de la tradición musical contemporánea con otros extraídos del jazz, estilo muy familiar para el compositor. Estructurada en tres movimientos, en el primero de ellos, Lento, el autor experimenta con el juego tímbrico que el quinteto de metales pone a su alcance, utilizando recursos como la yuxtaposición o la creación de atmósferas armónicas con ayuda de los solistas, junto a los cuales una OCG dúctil y dinámica completa la rica paleta del compositor. El segundo movimiento, Allegro, recuerda por su rítmica y su carácter expresivo a algunas páginas de Shostakovitch, mientras que el Moderato final presenta interesantes juegos de imitación entre los integrantes del quinteto de cuerdas y pasajes de carácter jazzístico muy pronunciado. Interpretados sin solución de continuidad, los tres movimientos de este concierto están en un perfecto equilibrio, siendo una clara muestra de lo que la forma concierto significa hoy en día dentro del discurso contemporáneo.

Cerrando el programa se pudo escuchar la Sinfonía núm. 2 en Do mayor op. 61 de Robert Schumann. Obra ya conocida por la audiencia de la OCG, Josep Pons nos redescubrió estas páginas ya clásicas en el repertorio de toda orquesta. Con un delicado sentido de la melodía, Pons potenció el trabajo tímbrico de Schumann, destacando el papel de los vientos-madera. Con unos tempi idóneos y un sentido dinámico de la partitura, Pons dio una lección magistral de cómo una buena dirección y un buen clima de trabajo son el secreto de una estupenda interpretación, razón por la cual el público granadino le regaló una prolongada y merecida ovación.

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