Confinamiento. Ha sido la palabra de moda, pero ojalá no vuelva a serlo. O al menos eso deseamos todos, aunque parezca que se nos ha olvidado. Granada está al borde de dar marcha atrás y regresar a alguna de esas fases en las que lo de circular libremente no era posible. Y sí, la culpa es nuestra aunque señalemos a... ¿la Junta, la Diputación, el Ayuntamiento, el Gobierno central de nuevo? ¿A quién culparemos esta vez? Estamos a viernes, 10 de julio, a casi cuatro meses de aquel día 14 de marzo en el que se decretó un estado de alarma cuyos coletazos aún siguen. Un estado de alarma que nos ha robado casi 100 días de vida, libertad y ocio; de disfrutar de cosas simples, como el verse un partido de fútbol como el que disputará esta tarde el Granada CF en Anoeta. Un encuentro que, de ganarse, acerca a los de Diego Martínez un paso más hacia Europa. ¿Y si se consigue? Al menos pongámonos la mascarilla para evitar que, si hay UEFA en Los Cármenes, podamos verlo. Aunque para eso nos tengamos que poner la mascarilla. A ver si al menos por esas sí que lo hacemos.

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