La evolución del Metro de Granada parece que toma cuerpo. Antes del final de año saldrá a licitación la redacción del proyecto de ampliación de líneas, que valorará las tres opciones que por ahora de barajan: hacia el sur, el centro y el norte. Mientras, la consejera de Fomento, Marifrán Carazo, avanza la intención de la Junta de acercar el Metro a diez pueblos situados en el Área Metropolitana. Se haría con un sistema de lanzaderas para mover rápido a los vecinos de las citadas localidades hasta puntos de enlace con el trazado del Metro. El plan, además, incluye la construcción de dos grandes aparcamientos disuasorios en Maracena y junto a la Base Aérea de Armilla, que contribuirían a evitar la masiva entrada de vehículos desde los pueblos hacia la capital, y así descongestionar la Circunvalación. La realidad es que nada es fácil en torno al Metro y las fechas para cualquier movimiento se alargan más de lo deseado por cualquier ciudadano. Lo único cierto, por ahora, es que a Granada le luce tener una consejera de aquí en la Junta. Más si se ocupa de la parcela de Fomento.

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