LA medida empezó con mal pie y así sigue. No se duda de la intención, pero los resultados son contundentes: sólo ocho ciudadanos se han beneficiado hasta ahora de la propuesta del IBI Social con que el Ayuntamiento de la capital pretendía ayudar a los "parias" de la ciudad. Ocho familias de las 25.000 que calcularon como posibles destinatarias de la propuesta de bonificación económica; nada más lejos de la realidad. A finales de año, el concejal de Economía, Juan Antonio Mérida, anunció la propuesta como una medida "estrella" dentro de la ordenanza de tasas e impuestos municipales para 2009. Se trataba de aplicar una rebaja del 10% a los ciudadanos con menos renta; a los "parias" como dijo entonces provocando una inmensa oleada de críticas. Además de no volver a utilizar aquella 'dichosa' palabra -como ya se ha prometido el concejal-, habría que tomar nota de los resultados. Leyendo la letra pequeña no era difícil prever que sería difícil acogerse a la rebaja. En todo caso, y como la vida misma, eso es la política: ensayo-error.