El gobierno municipal de Baza ha comunicado que despide a cuatro trabajadoras que prestan sus servicios en el Plan Integral Cuevas, un servicio de asistencia social en una de las zonas más necesitadas de intervención de la provincia, los barrios de Cuevas de Baza. "Son la trabajadora social, que está embarazada de ocho meses, la psicóloga y la monitora deportiva, que acaban de ser madres y aún están en periodo de lactancia , así como la ordenanza del centro", denunció ayer el PA en un comunicado.

Se trata de un "despido nulo e improcedente, según el Estatuto de los Trabajadores, máxime cuando es un servicio que continua su ejecución a cargo de una subvención de la Junta, que se sigue transfiriendo al Ayuntamiento bastetano pese a recortar su cantidad".

El PA denunció que, "paradójicamente y para mayor crueldad si cabe, de los siete trabajadores que prestan el servicio, el gobierno municipal ha decidido hacer fijos a tres y sin embargo ha despedido a mujeres que están en circunstancias muy especiales".

"Lo justifican en la necesidad de recorte presupuestario, cuando en realidad van a suponer un mucho mayor coste las indemnizaciones", destacó en un comunicado la asamblea local del PA.

El alcalde de Guadix, Santiago Pérez López, junto con parte de los concejales del equipo de Gobierno, acudieron a la puesta en funcionamiento del nuevo alumbrado público de la Barriada García Lorca, un acto simbólico con el que se quería poner a disposición de los vecinos la profunda remodelación llevada a cabo en el barrio por el Ayuntamiento.

Fueron muchos los vecinos que quisieron estar presentes en este acto en el que el alcalde destacó la profunda remodelación llevada a cabo en el barrio. Algo, que según recordó, se convirtió en una de las cuestiones prioritarias de su equipo de Gobierno "después de que la actuación, que correspondía en un primer momento a la Junta y para la que incluso se había anunciado la inversión, finalmente no fuera asumida por la Administración porque se decidió destinar esos fondos a la renovación de otras barriadas similares a la accitana".

Por eso el Ayuntamiento hizo el proyecto, licitó la obra, la adjudicó y la ha llevado a cabo, siempre teniendo en cuenta la opinión y las sugerencias de los vecinos. La actuación ha supuesto un coste de 220.000 euros destinados a la renovación de las redes de saneamiento y abastecimiento y a la renovación del alumbrado, entre otros aspectos.