Una vecina de Albuñol, María José Cervilla, ha denunciado la "negligente" actuación municipal llevada a cabo junto a su vivienda por el Ayuntamiento del municipio, consistente en el cerramiento de una tubería de paso de aguas fluviales, y que está provocando, con las primeras lluvias tras la obra, que el agua se acumule bajo la edificación, con el peligro para la cimentación que ello supone.

En este sentido, la afectada explicó que los operarios acudieron esta semana a su calle para satisfacer la demanda del dueño de la casa colindante, que se quejaba de la existencia de humedades en su vivienda debido a la tubería que da salida al agua de las calles traseras y desemboca entre los dos edificios. "Se presentaron tres operarios y cuatro policías locales para llevar a cabo la operación, pero tuve que llamar a la Guardia Civil para que los funcionarios me enseñaran algún documento oficial en el que se autorizaba dicha obra", criticó Cervilla.

Obtenida la resolución municipal, la vecina comprobó que la alcaldesa de Albuñol, María José Sánchez, había ordenado "el desvió de aguas pluviales", según recoge el documento. Sin embargo, los técnicos del municipio, en lugar de desviar el desagüe, procedieron a tapar una de las bocas de la tubería (la que vierte junto a la entrada de la vivienda de la afectada).

"Como la zona de entrada de la tubería (ubicada en la parte trasera y más alta del edificio) sigue abierta, el agua de las lluvias puede entrar en la canaleta -situada bajo la casa de Cervilla- pero al haberlo taponado no puede salir, quedándose acumulada bajo el edificio", alega la vecina, quien anuncia que acudirá a los juzgados para denunciar este hecho, ya que "si la orden habla de un desvío, por qué lo que hacen es un taponamiento", se pregunta.

Como consecuencia, Cervilla asegura que ayer empezaron a tener miedo con la llegada de las lluvias. "Estamos muy preocupados de que el agua dañe los cimientos del edificio y se derrumbe", afirmó y recordó la circunstancia de que Albuñol está formado por cuestas, por lo que la tubería sellada permitía que el agua no se estancara en las viviendas.