La Guardia Civil continúa buscando a un hombre de piel tostada, muy alto y de cuerpo atlético, según testigos, que presuntamente habría acabado con la vida de varios agricultores en distintas zonas del norte de España.

Crimen de noviembre

El primero de los asesinatos tuvo lugar el pasado 22 de noviembre de 2023. Pedro Oyón, un vecino de 68 años de Gardachales, en Tudela (Navarra), salió de su casa por la mañana, caminando, con destino a una finca cercana para recoger aceitunas.

Sin embargo, en el camino se le perdió la pista y no se volvió a saber nada más de él. Cuando llegó la hora de la comida su mujer, que lo esperaba en casa, comenzó a ponerse nerviosa ante su ausencia. Su cuerpo lo encontrarían instantes después en un olivar, con varios signos de violencia. Lo habían acuchillado y golpeado fuertemente. De la investigación se haría cargo la Policía Nacional.

Un segundo caso en diciembre

El segundo caso, de características similares, tendría lugar tan solo un mes después, el 21 de diciembre. A José Luis Aguado Martínez, de 80 años, lo encontraron muerto en un campo donde el trabajaba como agricultor.

Los hechos fueron similares a los acontecidos en Navarra en noviembre. El hombre había acudido a su huerto por la mañana y a la hora de comer, al ver que no regresaba, su mujer dio la voz de alarma. Fue su familia quien lo halló sin vida en el campo.

En un primer momento se pensó que podría haber tenido un accidente con una moto azada, pero luego comprobaron que las lesiones eran similares a las que presentaba el cuerpo de Pedro Oyón en Tudela. También se dieron cuenta, justo después, de que su coche, un Opel Corsa rojo, no estaba por ninguna parte.

Encuentran el coche en el escenario de otro crimen

Unos días más tarde, el 5 de enero, localizaron el cuerpo sin vida de Ramon Rosell Cierco, un hombre de 84 años al que encontraron en Vilanova de la Barca, en Lleida.

Al igual que las otras dos víctimas, Ramón había salido a realizar tareas agrícolas con olivos y se encontró de frente a un hombre que le estaba robando y que sería el mismo individuo que ejecutó a los otros dos agricultores. Al reprenderlo, éste se ensaó con él y lo asesinó asestándole varios golpes y cuchilladas. Junto a la escena del crimen encontraron el Opel Corsa rojo de José Luis, pero no el coche de Ramón.

Se sabe que el asesino se fue con su vehículo en dirección Andorra, que entró en el país vecino y que después cruzó la frontera de Francia. El vehículo fue hallado en una área de servicio, abandonado, horas después.

En estos momentos la investigación de este último caso, que está abierta y bajo secreto de sumario, se centra en dar con el asesino y en corroborar si se trataría de la misma persona que habría acabado con los otros agricultores de Navarra y Cataluña.