Las labores del hogar se han convertido en uno de los asuntos de debate de los tiempos modernos. Por ver quiénes la realizan y cómo las llevan a cabo.

Existen diferentes corrientes acerca de los métodos que hay que emplear para limpiar los baños, fregar el suelo del pasillo y poner los diferentes electrodomésticos que conforman habitualmente una cocina. Están aquellos que apuesta por la tradición, los que se dejan asesoran por los consejos familiares y los que se (auto)convencen viendo un tutorial en Youtube o siguen determinadas cuentas de Instagram y TikTok como si fueran su particular Biblia de la limpieza. 

Una cosa está clara: los electrodomésticos hay que darle un buen uso para que funcione correctamente durante muchos años y eso se consigue llevando a raja tabla los cuidados que presentan sus manuales, más aún con el avance tecnológico que se está produciendo en esta década y lo que puede suponer el fallo de cualquier pieza, por pequeña que se precie.

Es importante limpiar y más importante aún hacerlo bien, para lo cual resulta fundamental no creerse todos los mitos que circulan alrededor de los electrodomésticos. Que si lavar la ropa muchas veces ayuda a limpiar la lavadora, que si el frigorífico llena consume menos energía, o la radiación del microondas puede afectar a los alimentos ¡Falso! ¿Y con el lavavajillas? ¿Es mejor lavar los platos antes de meterlos al lavavajillas? Aquí os resolvemos la duda.

El poder del lavavajillas

Porque igual que existe gente que tiene la manía de colocar determinados elementos platos fuera del fregadero pensando que un peso excesivo puede hacer ceder la resistencia del mueble, también hay otros que ante la existencia de determinados restos de comida en los platos consideran que es necesario enjuagarlos bien antes de meterlos en el lavavajillas.

Se recomienda retirar los restos más grandes de comida, pero eliminar todo rastro de suciedad podría resultar contraproducente

Resulta que esta es una práctica poco recomendable que puede perjudicar el ciclo de lavado. El motivo es que los detergentes de lavavajillas actuales están diseñados para adherirse a los restos de comida, y si los platos están casi impolutos, el producto no tendrá donde pegarse para quitar la suciedad. Por otro lado, la alta temperatura del agua del lavavajillas se encarga de eliminar todo tipo de restos, por lo que, si los limpias antes, solo servirá para gastar más agua sin necesidad de ello, y con la carencia de este elemento en nuestros vidas actualmente.

Sí se deben retirar los restos más sólidos más grandes de comida, sobre todo para que no se peguen en las piezas móviles del lavavajillas, algo que podría perjudicar el proceso de lavado e incluso estropear el electrodoméstico, pero no es recomendable hacer un lavado precio en profundidad.