En los últimos días, ha surgido un rumor preocupante sobre la desaparición de ciertas monedas de euro a partir de julio. Sin embargo, es importante destacar que esta información es incorrecta y malinterpretada. En realidad, lo que ocurrirá es la retirada de ciertas monedas que son falsas o no aptas para la circulación, con el objetivo de prevenir posibles fraudes en el sistema monetario. Vamos a ver en detalle esta situación para brindar claridad y tranquilidad a los ciudadanos.

La orden ETD/647/2023 emitida en el Boletín Oficial del Estado establece que a partir del 1 de julio de 2023, se llevará a cabo la salida de una parte de las monedas de euro falsas y no aptas para la circulación. Esta medida está respaldada por la ley 10/1975, de 12 de marzo, de Regulación de la Moneda Metálica, que otorga al Banco de España la facultad de retirar del sistema monetario aquellas monedas que no superen los procesos de autentificación o que sean consideradas fraudulentas.

En este sentido, el Banco de España recibirá de las entidades de crédito y otras instituciones involucradas en la manipulación y entrega de billetes y monedas a título profesional, aquellas monedas de euro que, tras un riguroso proceso de autentificación, se consideren falsas o no aptas para la circulación. Estas monedas serán clasificadas y retiradas por la entidad bancaria, procediendo a la destrucción de las falsas y a la desmonetización de las no aptas, mediante un proceso físico que garantiza su inutilización.

Las monedas falsas son aquellas que han sido fabricadas o alteradas fraudulentamente para asemejarse a las monedas en euros. Por otro lado, las monedas no aptas para la circulación son aquellas auténticas, pero que han sido rechazadas durante el proceso de autentificación o que han sufrido alteraciones.

Es importante destacar que esta medida no implica en absoluto la desaparición de las monedas de euro legítimas y aptas para la circulación. La gran mayoría de las monedas que actualmente están en circulación seguirán siendo válidas y podrán utilizarse sin problemas. Además, el proceso de retirada y destrucción de las monedas falsas y no aptas para la circulación tiene como objetivo salvaguardar la integridad del sistema monetario y prevenir cualquier intento de fraude.

Además, es importante señalar que los materiales resultantes de la destrucción de las monedas no aptas podrán ser utilizados para acuñar nuevas monedas legales, siempre y cuando se cuente con la aprobación de la Dirección General del Tesoro y Política Financiera. En caso de que algunos de estos materiales no sean aptos, se procederá a su venta a través de subasta pública, y los fondos recaudados se destinarán al Tesoro Público.

En resumen, el rumor que sugiere la desaparición de las monedas de euro a partir de julio es infundado. Lo que ocurrirá es la retirada de aquellas monedas falsas o no aptas para la circulación, como medida de precaución contra posibles fraudes. Las monedas legítimas y aptas para la circulación seguirán siendo utilizadas con normalidad. Mantengamos la calma y sigamos utilizando las monedas de euro con confianza en nuestro sistema monetario.