Los senadores John Kerry y Joe Lieberman presentaron ayer un proyecto de ley energético y cambio climático que, pese al debate público por el derrame en el Golfo de México, contempla las explotaciones petrolíferas en alta mar.

Por otra parte, la Casa Blanca propuso ayer aumentar en un centavo por barril el impuesto a las compañías petroleras destinado al fondo de actuación ante los daños causados por los derrames de crudo y las consiguientes mareas negras.

Además, el presidente de EEUU, Barack Obama planteó elevar de 1.000 millones a 1.500 millones de dólares las indemnizaciones que podrá pagar ese fondo en caso de vertidos como el ocurrido en el Golfo de México.