Con tanto estímulo, teléfonos inteligentes, tabletas, vídeoconsolas e Internet, entre tantos otros, cada vez se ven menos niños en la calle jugando a los pasatiempos de siempre, a esos que, además, ayudaban a desarrollar las habilidades sociales y psicomotrices de los más pequeños. Las plazas cuelgan carteles de No está permitido jugar a la pelota que a pocos menores disuaden, pero las ciudades y los pueblos (estos menos) se están convirtiendo en lugares donde es difícil ver a prepúberes corretear persiguiéndose los unos a los otros.
Aún quedan lugares que resisten los envites de las nuevas tecnologías y los avisos prohibitivos. Los patios de los colegios son zonas reservadas para el esparcimiento y el juego y las madres y padres de Cúllar Vega se han propuesto transformarlos, aún más, en lugares para el ocio de los más pequeños, pintando y delimitando el espacio para los juegos de toda la vida, los tradicionales, como la rayuela, el tres en raya o, incluso, el Twister.
Los integrantes de las AMPAS San Miguel y Los Colorines, de los colegios de Infantil y Primaria La Viña y Francisco Ayala del municipio granadino han pintado los patios de ambos centros educativos aprovechando las vacaciones de verano, convirtiéndolos así en coloridos espacios de los que, a buen seguro, las niñas y niños disfrutarán a lo grande a partir de septiembre, cuando empiece el nuevo curso 2019/2020.
En torno a este asunto, la concejala de Educación del Ayuntamiento de Cúllar Vega, Mari Ángeles Polo, agradeció este gesto a las AMPAS de ambos centros, “ya que nos parece una iniciativa preciosa que ellos nos propusieron y que desde el Consistorio hemos apoyado al cien por cien, aportando la pintura”.
La edil del municipio de la Vega granadina señaló que las AMPAS San Miguel y Los Colorines “son un auténtico ejemplo a seguir, porque sus miembros no paran de proponer ideas para mejorar la educación de sus hijos y nuestros centros escolares, y para nosotros como Ayuntamiento son un verdadero orgullo”.
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