Vivir en Verano

El bronceado "no debe ser un sinónimo de belleza"

  • El uso de ropa, gorras y gafas de sol son complementarias a los protectores solares. 

Aplicación de crema solar

Aplicación de crema solar / M.G.

Agustín Buendía, profesor dermatólogo de la Universidad de Granada, instruye acerca de la continua exposición al sol, advirtiendo sobre los problemas que esta costumbre provoca. De esta forma, el especialista señala que el uso de cremas solares no es suficiente, ya que debe ser completada con el empleo de gorras, ropa y gafas de sol. 

Buendía, que además es el coordinador nacional de la campaña Euromelanoma,  así como de las resultantes de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV), incide en la necesidad de acabar con los falsos mitos relacionados con la fotoprotección, indicando que "el bronceado no se debe buscar como un sinónimo de salud y de belleza, porque es un mecanismo de defensa de nuestra piel ante la radiación solar".

Este especialista apunta sobre los protectores solares, matizando que su uso no debe estar dirigido a permanecer más tiempo al sol, sino para la correcta protección durante el tiempo de exposición debido a la práctica de deportes, baños o estancias en playas. 

Señala, además, que "la crema debe ser una medida de fotoprotección complementaria, pero no la única que empleemos este verano". A esto añade que la ropa es una excelente medida de protección que se vuelve más eficaz "cuanto mayor sea el entramado de hilos y más oscura sea".

También recomienda utilizar sombreros con alas de más de 7 centímetros, con el objetivo de mantener protegidas las orejas, el cuello y la nariz, además del uso de gafas de sol que se encuentren convenientemente homologadas y que posean cristales oscuros. 

Informa sobre el peligro de la exposición al sol entre las 12 y las 16 horas, algo que reduciría hasta en un 65% los daños provocados por la radiación ultravioleta B, responsable de las quemaduras y daños en el ADN.

En cuanto al uso de cremas solares, el experto de la UGR recomienda utilizar factores de protección altos, por encima del 30, “y ser muy generosos en la aplicación de este producto sobre la piel, ya que es necesario aplicar 2 mg por cm2 de nuestro cuerpo en cada exposición al sol para que la crema sea efectiva, lo que equivaldría a llenar nuestra mano de crema en cada aplicación”.

En España, anualmente se producen 4.000 nuevos casos de melanoma, suponiendo una tasa que ha sido duplicada e incluso triplicada. Sin embargo, según la Organización Mundial de la Salud, pese a que el cáncer de piel es el más frecuente en el mundo, también es el más evitable, ya que un 80% de los casos podrían reducirse "con hábitos saludables de fotoprotección desde la infancia". 

Los niños reciben hasta tres veces más radiación que los adultos. La piel tiene memoria, de modo que los daños que causan los rayos UV se acumulan a lo largo de los años. Por ello, es imprescindible el fomento de hábitos fotosaludables desde la infancia. 

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios