"Si todas las mañanas se dice que estamos mal, la gente se esconde y sigue ahorrando y no compra". Con estas palabras criticó ayer el consejero de Vivienda, Juan Espadas, la actitud de "queja permanente" que, en su opinión, mantiene la asociación de promotores andaluces Fadeco. Para el titular de la Vivienda, la organización, lejos de generar estímulos positivos entre los ciudadanos para reactivar la demanda, genera "incertidumbre y desconfianza".

Espadas ha respondido así a la queja de los promotores, por no haber sido informados de las ayudas de la Junta al stock de viviendas sin colocar, y que consiste en vender al precio del valor hipotecario a cambio de un préstamo personal que se paga a partir del noveno año de hipoteca y que permite en los ocho primeros años una rebaja de las cuotas hipotecarias de entre el 30% y el 40%. Además, Espadas ha recordado a los constructores que la medida, adoptada conjuntamente por las consejerías de Vivienda y de Economía, está al margen del Plan de Vivienda y Suelo 2008-2012, y no está sujeta a la negociación con el sector inmobiliario.

Asimismo, Espadas ha sostenido que se trata de una medida cuyo objetivo es "identificar el mejor producto para el comprador y no saber qué le parecía al promotor", si bien ha indicado que el éxito de la misma estará en función de que haya propietarios dispuestos a vender en esas condiciones, porque compradores sí los hay. Con todo, el consejero ha pedido la colaboración de Fadeco para que aflore la reserva de viviendas y ha confiado en que, una vez que ya está definido el producto, "lo utilicen porque lo habían demandando".