Mucho tardaron los jugadores del Baza y del Arenas en meterse en este partido tan especial. Y no sólo por lo poco habitual de tener que disputar una sola parte, sino principalmente porque la responsabilidad de estar ambos conjuntos en la zona baja de clasificación, hace que las cabezas atenacen las piernas, y la responsabilidad se apodere de los conceptos técnicos. Pero conforme pasaron los minutos, sobre todo el Baza, fue dejando esta presión y trenzando un poco el juego en el centro del campo, ayudado por Óscar y Oliver, que propiciaron desatascar la zona ancha y dar amplitud al campo.

No obstante comenzó mejor el Arenas, y disfrutó de una ocasión por medio de Ismael, pero Darío adivinó el lanzamiento y se hizo con el balón. A partir de ahí desapareció el conjunto armillero y fue el Baza el dueño y señor del resto del partido. No hubo demasiadas ocasiones de gol tampoco por parte local, la más clara fue una jugada de coraje de Guillermo, que tras luchar junto a la línea de portería con Javi López, logró la posesión del balón y se acercó a Olvera, pero el portero en un alarde de reflejos logró meter una mano milagrosa.

Insistió el Baza y fruto de esta constancia llegó la jugada clave del partido a diez minutos del final. Un balón metido en el área visitante y que conducía Dani, fue cortado con la mano por el defensa armillero Gabri. El colegiado melillense, muy cerca de la jugada, no dudó en señalar el punto de penalti. Se encargó del lanzamiento Óscar. Raso y por la izquierda logró batir a Olvera y poner el definitivo 1-0 en el marcador.

Con esta desventaja intentó el técnico visitante, Alberto González, buscar un revulsivo. Retiró al defensa Iñaki y dio entrada al atacante Chori, además de adelantar a Javi López. Estos movimientos dieron un poco de agresividad arriba al Arenas, pero el Baza supo defender bien el resultado. Al final victoria local, que le da un poco de oxígeno y deja al Arenas a tres puntos de distancia.