La afición del Granada recibió a sus jugadores tras el himno oficioso de la entidad pidiéndoles a sus jugadores que le echaran más testiculina. Tras la lamentable imagen que ofreció en el estadio de los Juegos del Mediterráneo, se esperaba un Granada CF comprometido, con garra y presionante. Y eso fue lo que se pudo ver anoche en Los Cármenes. Un dominio aplastante en el primer acto basado en una gran circulación de balón gracias a la calidad de jugadores como Recio o Fran Rico que junto a Piti y Brahimi desarbolaron a un pobre Valladolid. Pese a un arranque dubitativo tras el receso, el tanto de Recio desde la frontal terminó por finiquitar un partido que debe servir para crecer todos juntos.

Gran arranque

Liderados por Fran Rico en la medular, que se movió cómo y por donde quiso en todo momento, los de Lucas Alcaraz llegaron con suma facilidad a la portería de Mariño. En apenas once minutos se gozó de tres claras ocasiones de gol, incluido el tanto de Jeison Murillo. Pero todo basado en una presión asfixiante sobre el Valladolid que apenas jugó en campo contrario para alegría de Roberto. Tanto Brayan Angulo como Nyom creaban superioridad en banda, de lo que se aprovechó Piti y sobre todo Brahimi, que volvió loca a la zaga del cuadro de Juan Ignacio Martínez.

Dueño y señor

Ayer volvió a funcionar el trivote del centro del campo, lo que permitió imponer el ritmo de partido que más convenía en cada momento. Tanto Recio, con mucha más llegada que en otros encuentros y autor de dos goles, como Fran Rico, tuvieron mucha movilidad en la medular y de eso se benefició el equipo, que tenía salida por dentro pero también por fuera. Rico impuso su calidad y ello se notó. Cambios de orientación, toque en corto, ayudas defensivas y clave en la estrategia, hizo uno de los sus partidos más completos con la elástica rojiblanca.

Si Brahimi funciona...

Es el termómetro del Granada CF. Si el franco-argelino está motivado y tiene confianza, no hay quien lo pare. Suyas fueron las mejores acciones ofensivas, ayudado por las constantes subidas al ataque de Brayan Angulo que impedía a la zaga vallisoletana hacerle ayudas al '10' rojiblanco, por lo que pudo encarar una y otra vez a su par ganándole casi todos los duelos. Le faltó entenderse un poco más con El Arabi.

Un diamante

Tiene errores a veces por ser demasiado tranquilo, pero el nivel que ha mostrado Jeison Murillo en la primera vuelta supera el notable en su debut en la máxima categoría. Ayer volvió a dar una lección de colocación, concentración, anticipación e inteligencia. Tiene mucho oficio pese a su edad y encima anotó el primer tanto del partido. Un diamante en bruto que se retiró lesionado pero al que habrá que cuidar, sin duda.

Y a pensar en Osasuna

José Ignacio Martínez quiso cambiar la dinámica al choque con dos cambios en el descanso y lo cierto es que el Valladolid comenzó mucho más incisivo en ataque ante un Granada más replegado, pero el tanto de Recio terminó por finiquitar el duelo. Ante la cita tan importante del próximo sábado ante Osasuna, se bajó mucho el nivel de presión, Brahimi apenas tuvo que aparecer dejando pasar los minutos para lograr tres puntos que hacen ver la segunda vuelta del campeonato con optimismo. Pero siempre y cuando la actitud sea como la que se ofreció ayer y no como la que se vio en Almería. Se aprendió de los errores. Pina sabe de esto y lo ha vuelto a demostrar.