St. Pedro es un artista contemporáneo y con varias aristas. El St. Pedro local, que compone música con su banda de toda la vida, el St. Pedro emigrante, que viajó hasta Miami para labrarse un futuro en la industria musical, el St. Pedro que ha sido finalista de dos programas televisivos como La Voz y el más reciente Benidorm Fest, se da la mano con un artista erudito y conocedor del folklore musical hispanoamericano. Tras digerir el éxito de Dos extraños en la plataforma de lanzadera al Festival de Eurovisión, el canario presenta su primer álbum, Esta vida que elegí, un trabajo compuesto por doce canciones que reflejan el universo de contrastes y la riqueza musical de St. Pedro. El disco ve la luz bajo el sello de Interscope y con su single El idiota como carta de presentación, un merengue elegante y sofisticado que apunta directamente a la pista de baile.

–¿Qué nos puede adelantar de su primer álbum titulado Esta vida que elegí? –Es un disco muy variado musicalmente. Es una especie de espejo de las fiestas de pueblo canarias. En estas fiestas suena los merengueros clásicos, las salsas, las cumbias… Es un cuentacuentos que explica el origen de la música típica de las fiestas canarias.

–¿En qué se ha inspirado para componer las canciones que forman parte de su primer disco? –En vivencias personales, en relaciones sentimentales que salen mal, en mi familia… También en la música que sonaba de fondo durante la infancia cuando todo era felicidad y alegría.

–Su carrera musical tiene un punto de inflexión con su traslado a Miami para labrarse su futuro en esta difícil industria. ¿Qué ha estado haciendo al otro lado del charco? –Estuve viviendo, componiendo, haciendo música, aprendiendo de los productores y del resto de artistas que residen allí. Hice como una especie de universidad de la industria de la música y de la vida también. He pasado de vivir en un pueblo pequeño de 10.000 personas en la casa de mi madre a vivir en Miami.

–Aunque para algunos pudiera ser un desconocido, Pedro Hernández fue finalista de La Voz en 2017. ¿Qué recuerdos guarda de aquellos momentos bajo la batuta de Juanes? –De finales va la cosa. Soy como el Atlético de Madrid llegó a las finales y después… Los recuerdos son muy buenos. Mi paso por La Voz y conocer a Juanes fue el punto de inflexión más importante de mi vida. Juanes me presentó a Rebeca que ahora es mi mánager. Eso me ha cambiado la vida.

–¿Qué balance hace de su paso por Benidorm Fest? –Súper positivo. Agradecido con todo el trato que he recibido por parte de mis compañeros, TVE, la organización…

–Ha quedado a un solo escalón de representar a España en el Festival de Eurovisión… ¿Cómo se digiere eso? –Ha sido una sorpresa enorme ver el apoyo tan grande que se le ha dado a mi canción Dos extraños. Me presenté con un bolero a Benidorm Fest y era consciente de que era una apuesta muy arriesgada para salir victorioso. Pese a ello, a la gente le gustó.

–Usted ha sido muy valiente tan solo por el mero hecho de presentar una balada romántica a Benidorm Fest… ¿Por qué ha optado por Dos extraños en lugar de otra canción? –Pensábamos que iba a ser un poco la que más contrastase con todo lo que se iba a presentar a Benidorm Fest. No tenía nada que ver con que el bolero fuera declarado Patrimonio de la UNESCO este año (risas).

–Otras aficiones aparte de la música, ¿a qué dedica su tiempo libre? –A mi me encanta jugar a la Play Station, jugar al fútbol, entrenar en el gimnasio, estar con mis amigos y la familia. Soy un tío bastante normal en ese sentido.