El coordinador provincial de Izquierda Unida (IU) en Granada, Manuel Morales, mostró ayer su "total respaldo y confianza" en el que fuera vicepresidente de la Diputación Julio Bernardo y a la ex diputada provincial de Cultura y actual portavoz de la formación en la institución provincial, María Asunción Pérez Cotarelo, en lo que respecta a su actuación en la organización de la feria empresarial Mercamed, que actualmente investiga el Juzgado de Instrucción 6 de Granada.

Bernardo es uno de los imputados en la causa, y Pérez Cotarelo fue denunciada a posteriori por el actual equipo de gobierno en la Diputación, en manos del Partido Popular, aunque el instructor no aceptó la ampliación de denuncia. Sin embargo, la Diputación provincial, personada como acusación en el caso, considera que existió una posible implicación de la diputada provincial y después anunció la presentación de una denuncia independiente contra ella y seis empresarios más en el Decanato de los Juzgados de Granada.

Para Morales, el PP en la Diputación de Granada está haciendo "un mal uso del dinero público" puesto que "no son sus abogados" los que están "persiguiendo a los cargos públicos del PP", sino que son unos "abogados particulares escogidos por el PP pero pagados con dinero público".

Además, el coordinador provincial de la formación de izquierdas señaló que en este caso "lo único que parece que puede llegar a haber" es "una tramitación administrativa apresurada y poco rigurosa".

Además, Morales resaltó que "nadie, ni siquiera la acusación del propio PP, está hablando de que alguien se haya quedado dinero", y que la cuantía final que está en cuestión "no llega a 60.000 euros", por lo que "posiblemente al final se gasten más dinero público en los abogados". "Es el afán de Sebastián Pérez de echarle basura encima a IU. Ojalá la Diputación estuviera en lugar de eso preocupándose de hacer una segunda feria comercial de Granada en Marruecos".

Por otra parte, se refirió a la "honestidad" de Julio Bernardo, que, después de haber sido político a lo largo de 16 años, durante los que ocupó cargos como el de vicepresidente de la Diputación provincial, ha regresado a su puesto como cartero, aunque manteniéndose en la Secretaría Provincial del Partido Comunista, cargo por el que Bernardo no percibe remuneración alguna.