Casi 13.000 mujeres sufrieron algún tipo de violencia en Granada entre los años 2015 y 2019. Así consta en un estudio sobre violencia contra la mujer publicado hace unos días por el Ministerio del Interior, en el que figuran datos por provincias. En la provincia hubo 12.871 víctimas de violencia física, psicológica, sexual o económica en esos cinco años. De ellas, 108 eran menores de edad. Otras  1.574 estaban en la franja comprendida entre los 18 y los 30 años cuando soportaron los episodios de violencia, y 1.720 entre los 31 y los 40. Entre los 41 y los 50 años se contabilizaron 1.159 víctimas. A partir de esa edad los números descienden sensiblemente. Hubo  524 mujeres que denunciaron conductas violentas entre los 51 y los 65 años, y sólo 133 que lo hicieron por encima de esa edad. La gran mayoría de ellas (4.082) eran españolas. Otras 297 procedían de otros países de la Unión Europea, 91 del resto de Europa,  414 de América Latina, 268 del Magreb, 21 del África Subsahariana y 45 del resto del mundo.

El Ministerio del Interior distingue el concepto de víctimas del de victimizaciones. Víctima se aplica a una sola persona, mientras que victimizaciones corresponde a cada uno de los hechos delictivos que haya podido sufrir una persona. Así, una persona puede sufrir más de una victimización, ya que puede padecer al mismo tiempo violencia física, psíquica, sexual y económica, lo que serían cuatro victimizaciones en una sola víctima.

El total de victimizaciones de la provincia granadina entre 2015 y 2019 fue de más de 20.000 casos. Esto supone una tasa de 3,0 victimizaciones por cada mil habitantes. Granada está por encima de la media nacional, que se sitúa en 2,8. Estos episodios se dividen de la siguiente forma: 5.095  de violencia física, 6.610 psíquica,  815 sexual y 351 económica. En el primer grupo hubo 9.343   casos de violencia de género,  1.248 de violencia doméstica y 2.280 por otras relaciones. Se considera violencia de género a la que sufre una persona a manos de su cónyuge, pareja o ex pareja. La doméstica es la infligida por algún familiar –padres o hijos–. En el capítulo de otras relaciones se incluyen amigos, compañeros de trabajo o de clase, vecinos y conocidos.

La violencia de género ha cobrado estas últimas semanas mayor relevancia tras la emisión del documental en el que la protagonista, Rocío Carrasco, relata un cúmulo de episodios de malos tratos y vejaciones por parte de su ex pareja Antonio David. La reacción de éste a través de su abogado será a golpe de denuncia. El letrado ha advertido que adoptará medidas legales.

En España, según el informe del Ministerio, las victimizaciones por hechos relacionados con la violencia física muestran las cifras más altas durante el año 2019. Por tipología penal, los malos tratos en el ámbito familiar, con el 86,6%, son los hechos más numerosos, seguidos de las lesiones (9,2%). Dentro de la tipología de homicidios dolosos, se incluyen tanto los hechos consumados como las tentativas, con un aumento en las cifras de estos en los dos últimos años.

El estudio también destaca que se observa estacionalidad en la serie de datos de hechos conocidos, correspondiendo el mayor volumen a los meses de julio y agosto, coincidiendo con la época veraniega. Durante los tres últimos años la tendencia muestra un patrón de crecimiento, alcanzado su pico máximo en agosto de 2015, coincidiendo con la entrada en vigor de la reforma del Código Penal. Además de los malos tratos habituales y las lesiones, en el caso de las extranjeras se da también con más frecuencia que en las nacionales el delito de detención ilegal.

El análisis por lugar de comisión del delito refleja que el mayor porcentaje de hechos por violencia física ocurre en las viviendas y anexos (66,3%), seguidas a cierta distancia de las vías de comunicación (23,0%). Entre estos dos lugares se sitúan nueve de cada diez casos. Interior destaca “el carácter prácticamente residual de los hechos ocurridos en medios de transporte”.

En cuanto a los casos de violencia psíquica, el Ministerio contabilizó 6.610 casos en la provincia de Granada entre 2015 y 2019. Esto sitúa de nuevo a esta demarcación territorial en la media de España, con 1,54  asuntos por cada mil habitantes. Al igual que ocurría con la violencia física, la inmensa mayoría de denuncias (5.095) se incluyen dentro de la violencia de género (3.729), mientras que otros 762 casos están vinculados a la violencia doméstica y 604 con otras relaciones.

Las victimizaciones por hechos relacionados con la violencia psíquica muestran las cifras más altas durante el año 2019. Por tipología penal, los malos tratos en el ámbito familiar, con el 41,6%, son los hechos más numerosos, seguidos por los quebrantamientos de orden de protección (14,8%). El análisis del perfil de la víctima de violencia psíquica por edad muestra al grupo de edad comprendido entre los 31 a 40 años como el más numeroso. A pesar de ello, la distribución en términos porcentuales por tipología penal (consumados y tentativas) refleja un patrón muy similar en todas las edades.

Los episodios de violencia sexual han ido en aumento en los cinco años que son objeto del estudio. Las cifras más altas son las del año 2019. Por tipología penal, los abusos sexuales son los hechos más numerosos, con el 53,5% de los casos. Le siguen las agresiones sexuales, que representan un 19,1% del total. Respecto a la violencia económica, la tendencia ha sido la contraria. Los casos fueron más numerosos en el año 2015 que en los ejercicios posteriores. Por tipología penal, los impagos de prestaciones económicas son los más numerosos. Representan el 91,8% del total de los casos. El grupo de edad de entre los 31 y los 40 años es el más afectado, ya que es la franja que más suele tener hijos pequeños.