"Aprender". José Ignacio Fernández, estudiante del último curso del grado de Física en la Universidad de Cantabria tiene muy claro qué hace esta semana en Granada. Desde el pasado lunes, la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Granada acoge la primera edición de la Escuela Dones Xcitech, la primera escuela Dones de Ciencia y Tecnología, ligada al proyecto del acelerador de partículas que se proyecta en Escúzar. Ponentes de primer nivel y estudiantes más que motivados son los ingredientes de esta primera edición de esta cita formativa, una "incubadora" de futuros profesionales altamente cualificados que trabajarán, muy posiblemente, en grandes infraestructuras científicas. Como el IFMIF Dones.

Fernández reseña que está interesado en el tema de la fusión. Es el mismo proceso que se da en el Sol, en las estrellas, y que la ciencia busca reproducir en la Tierra para dar a a luz un nuevo modelo energético. Las futuras plantas de fusión nuclear se plantean como alternativa al actual modelo energético y en ese futuro Granada tiene un papel clave. En el acelerador de partículas se validarán los materiales que se emplearán en esas centrales de fusión nuclear. Este joven estudiante de grado reconoce que empezó a escuchar sobre el acelerador de Escúzar hace más o menos un año. Del curso destaca que "está fenomenal". Su trabajo de fin de grado versa sobre la fusión nuclear y, quién sabe, en unos años puede que José Ignacio desarrolle parte de su carrera profesional en Granada.

Moisés Oñoro, de la Universidad Carlos III, realiza un doctorado en materiales que serán de interés en la fusión nuclear, capaces de soportar las altísimas temperaturas que se alcanzarán en los futuros reactores. "Mi objetivo es traer material para poder probarlo aquí", en Escúzar, resume sobre su trabajo de investigación. Sobre el IFMIF Dones, destaca que los científicos dedicados a la investigación de materiales siguen la pista desde hace años del proyecto que, casi seguro, se hará en Granada. 

Blanca Biel, profesora de Física Atómica, Molecular y Nuclear de la Universidad de Granada, es codirectora de la escuela Dones Xcitech junto a Eberhard Diegele. La escuela celebra este 2023 su primera edición con la idea de mantenerse en el tiempo. Suma un año de esfuerzos que esta semana se han materializado en un completo programa formativo con ponentes de primer nivel, como Steven Cowley, referente mundial en fusión nuclear.

Además de esta escuela, la UGR trabaja en la puesta en marcha de un posgrado, que podría nacer como título propio, que dé formación especializada en el terreno de las grandes proyectos de ciencia como el acelerador. Por lo pronto, la Escuela se plantea como una oportunidad única para generar cantera de profesionales de grandes infraestructuras científicas, un ámbito de la industria y la ciencia que mueve miles de millones de euros. "La idea es hacer una escuela que dé formación especializada, no sólo sobre el acelerador, también sobre grandes infraestructuras, desde varios puntos de vista, también desde la gestión o temas legales", señala sobre la iniciativa. En esta primera edición se han cubierto todas las plazas, 40, y los ponentes son de primer nivel. "Ha habido mucha expectación", reconoce Biel. Granada se ha convertido, esta semana, en un punto de reunión de algunos de los responsables científicos de grandes proyectos científicos.

Además de investigadores y expertos, en la Escuela Dones Xcitech hay estudiantes de países como Finlandia, Suecia, Lituania, Francia o Croacia, además de españoles, que buscan "formación especializada o ampliar estudios para sus tesis", enumera Biel, que destaca que también es notable la presencia de empresas "que han venido a buscar perfiles que son muy difíciles de cubrir". Es el caso de Safran. Pilar Gil apunta que, como Seven Solutions, llevan muchos años en primera línea como uno de los impulsores del proyecto del acelerador. Gil reconoce la dificultad para cubrir determinados puestos, muy especializados, en el sector. "Todos los que están aquí tienen interés ene el proyecto y nosotros tenemos interés en tener cantera". Además de Safran, en la escuela se han dado cita representantes de Grupo Sener, Suprasys, Tekniker Research and Technology Centre, el Lithuan Energy Institute, SPC, Ecole Polytechique Fédérale de Lausanne, Accenture,  Institut Ruđer Bošković de Zagreb,Izertis, Navigation & Timing, Renaissance Fusion, R&D Engineer y DEM de Barcelona. Asimismo, hay presencia de miembros de las universidades de Helsinki, Alicante, Carlos III, Cantabria y Sevila, además de la de Granada.

Irene Álvarez es una de las estudiantes de la UGR que participan en esta iniciativa formativa. Graduada en Ingeniería Electrónica, realiza el doctorado en el Departamento de Física Atómica, Molecular y Nuclear de la UGR. En su grupo de investigación les hablaron de los contratos para doctorados promovidos por la Universidad y el Ciemat, solicitó uno y ahora se forma en el proyecto. Sus directores de tesis son Marta Anguiano, por parte de la UGR, y Fernando Mota, del Laboratorio Nacional de Fusión. "Esto es para años", augura sobre el acelerador de partículas, una infraestructura en la que muy posiblemente, gracias a la formación que ahora recibe, formará parte.

Porque lo primero es saber de qué va esto del acelerador, en todas sus facetas. Por eso la escuela capta científicos e ingenieros, pero también aborda cuestiones de gestión de proyectos científicos y temas legales.

La UGR ya trabaja en encauzar estudios e investigaciones hacia el ámbito de trabajo del acelerador y, también, el edificio que proyecta junto a esta infraestructura, el UGR Dones. El objetivo de la Universidad es que el primer grupo de investigación que estrene el UGR Dones sea el Laboratorio de Mecatrónica, un grupo de trabajo que cuenta con maquinaria pesada y que tendrá en la nave que se levanta en la Ciudad Industrial Tecnológica y Área de Innovación (Citai) de Escúzar espacio para crecer.