Más de 700 docentes que ejercen en colegios e institutos de la provincia de Granada esperan que se concreten los planes para el próximo curso escolar. Se trata de los refuerzos denominados apoyos Covid, con los que se mejoró la dotación de personal en los centros educativos, tanto públicos -con unos 668 refuerzos- como de la red concertada, con otro centenar de profesores extra. 

Según indica la responsable de Educación en Granada de CSIF, Emilia Santos, en parte de los centros en los que ha habido apoyos Covid, estos refuerzos se han destinado a bajar la ratio de alumnos por aula, una de las cuestiones que más preocupaban al inicio del curso. La pandemia obligó la suspender la docencia presencial el 16 de marzo de 2020, y la vida en las aulas no se retomó hasta seis meses después, en septiembre. Tras desarrollar buena parte del curso, el balance para Santos es “positivo”, y los centros han podido mantener la rutina pese a la sucesión de olas de contagios. 

Sobre los apoyos Covid, la responsable de CSIF indica que “hemos pedido que se estabilicen las plantillas, y que esos refuerzos se conozcan” antes de que llegue el verano, con el fin de que los centros puedan organizarse de cara a septiembre. La Central Sindical Independiente de Funcionarios señala asimismo que se debería atender a las necesidades que planteen los institutos en relación a sus necesidades por áreas de conocimiento: “Que puedan decir si requieren de una especialidad o de otra”.

El consejero de Educación y Deporte, Javier Imbroda, manifestó tras la reunión conjunta de la Conferencia Sectorial de Educación e Interterritorial de Sanidad que ha propuesto al Ministerio de Educación “mantener el mayor número de refuerzos docentes que sea posible”, además de apostar por la plena presencialidad “como norma general”. Cabe recordar que este curso 2020/2021 se permitió la docencia híbrida a partir de tercero de la ESO, con el fin de que en las aulas fuera posible mantener la distancia social y evitar, de esta manera, la propagación del virus. Desde ANPE, su responsable provincial, Manuel Pérez, reflexiona sobre la presencialidad que se prevé para el mes de septiembre, ya que, si se quiere mantener la distancia social, será necesario que se refuercen las plantillas de los centros en los que este año ha habido clases online. “Si desaparece la semipresencialidad, se requerirán desdobles, y eso puede suponer un aumento de plantilla”, infiere Pérez, que también destaca la necesidad de que se mantenga la figura del coordinador Covid, el docente que en cada centro educativo ha sido enlace con Salud. “De los 7.000 docentes” con los que se reforzó la plantilla docente este curso en Andalucía, unos 700 se han incorporado a la docencia para asumir las horas de reducción de estos coordinadores, explica Pérez. Por lo tanto, el responsable provincial de ANPE apuesta por mantener ese profesorado, que llegó para que los coordinadores pudieran realizar su trabajo. “Nos gustaría que se negociara y que se reflejara en acuerdo sindical”, apostilla Pérez.

Desde ANPE se señala que, además, la población escolar no estará previsiblemente vacunada para el próximo curso. “El profesorado va a seguir expuesto”, añade Pérez. En esta misma línea de que la pandemia no ha finalizado se manifiesta Mercedes González, de CCOO. “Queremos que los apoyos Covid se mantenga. Es el mínimo imprescindible”, alega. 

Para González, la presencialidad al cien por cien es lo deseable, pero deben mantenerse algunas cuestiones como la distancia social o la menor ratio de estudiantes por aula. Ya se ha indicado que en septiembre los alumnos seguirán con mascarillas. “Vamos a seguir pidiendo que se mantenga el esfuerzo que Educación ha realizado este año” con la mejora de la dotación de personal, aclara la responsable de CCOO, que asegura que se desconocen los planes de la Junta. 

“Hay motivos para el optimismo, se notan los efectos de la vacuna, pero la pandemia no está superada”, arguye González, que señala que la presencialidad también es importante para la economía, para que las familias puedan conciliar. “Los apoyos Covid son fundamentales”, añade la responsable de Enseñanza en Granada de CCOO también para paliar las situaciones de desventaja de parte del alumnado, agravada por medio año sin docencia presencial. “Como sociedad, no nos podemos permitir una generación perdida”.

Imbroda manifestó tras la reunión mantenida ayer que es necesario “continuar con la organización de los grupos de convivencia escolar, la transformación del horario de coordinación Covid en horario de coordinación de salud, manteniendo la conexión de los centros educativos con los centros de salud y por tanto consolidando los recursos en ambos ámbitos; continuar con el refuerzo de limpieza y las medidas generales de higiene personal, el uso de mascarillas en espacios cerrados y la ventilación natural”.

Por su parte, la ministra de Educación, Isabel Celaá, indicó que aunque se pueda acortar esta distancia personal en el aula -con lo que se podrá aumentar el número de alumnos- “no queremos prescindir” de los profesores adicionales que se contrataron el año pasado, en torno a 40.000 más, porque con ello se puede “sostener mejor” el sistema educativo y responder a las necesidades de refuerzo escolar y continuar con la codocencia (dos profesores en un mismo aula). Se prevé que la distancia interpersonal se rebaje a partir de septiembre en las aulas desde el metro y medio al metro y veinte centímetros, una medida que, en cualquier caso, no se ha podido aplicar en parte de las aulas y que los sindicatos prevén que tampoco se podrá afrontar tal y como se prevé de cara al próximo año escolar.

Sobre los fondos, Celaá afirmó que las comunidades disponen de 10.000 millones de euros de los fondos europeos, y que son los gobiernos regionales los que deben fijar sus prioridades a la hora de destinar ese dinero.

A lo largo de este curso, directores de los centros han manifestado su posicionamiento a favor de mantener los recursos extraordinarios, tanto de limpieza como de personal docente y de administración. Cabe recordar que todavía persiste la tasa de reposición (este año está en el 110%) y que se viene de un escenario en el que durante años se mermó la plantilla de los centros. Además, los centros también han destacado el papel de los coordinadores Covid para atajar en la medida de lo posible las situaciones de riesgo y, por último, han constatado la mejora del rendimiento académico.

El secretario de Enseñanza de UGT Servicios Públicos en Granada, Calixto Martínez, defiende tres puntos, que se mantengan las plantillas o incluso se mejore la dotación de profesores, que se sepa antes de que comience el curso el número de docentes que formarán los claustros y que se baje la ratio, extremo en el que Martínez incide. Además de apostar por la presencialidad, Martínez señala que “lo que queremos es que las plantillas Covid se mantengan”, unos 700 efectivos en el caso de la provincia, 7.000 en el territorio andaluz. “Este curso han llegado tarde”, añade, lo que ha dificultado la planificación en los centros. ç

El representante del sindicato UGT también señala que a inicios de este curso escolar se abordó en mesa sectorial que las necesidades de refuerzo rondarían los 10.000 docentes en la comunidad. “Harían falta más docentes, ante todo para bajar la ratio”, una cuestión que “llevamos pidiendo desde hace años. Eso es calidad”, zanja Martínez.