Granada debe estar llena de amantes del bricolaje. Al menos así lo parecía ayer, cuando la primera tienda del Centro Nevada, Leroy Merlin, abrió sus puertas a los compradores. El aparcamiento del centro, que se ha estrenado con los primeros clientes de la multinacional, estaba a rebosar, y el tráfico hacia la gran superficie fue incesante durante la mayor parte del día. A pesar de todos los temores, ayer no hubo grandes colapsos ni incidencias destacables, más allá de las posibles confusiones de conductores que no tenían muy claro por dónde se entra o se sale del mastodóntico centro comercial.

El alcalde de Armilla, Gerardo Sánchez, confirmó ayer tras analizar el primer día de funcionamiento de Leroy Merlin que "los accesos provisionales se han comportado bien", por lo que el Ayuntamiento se mostró muy satisfecho. Claro que queda por ver "qué pasará el sábado", el día en el que se espera mayor afluencia comercial. Y, más allá todavía, habrá que ver qué pasará cuando el Nevada abra definitivamente sus puertas, convirtiéndose en el principal foco de comercio de la provincia.

De ahí que el Ayuntamiento de Armilla haya llegado a un acuerdo con el Ministerio de Fomento para agilizar lo máximo posible el proyecto de reforma de los accesos directos de la autovía A-44 al centro comercial y al municipio. La solución pasa por la cesión al Ayuntamiento de todos los viales afectados, de forma que será el propio Consistorio el encargado de dirigir una reforma cuyo coste económico será asumido por el promotor del Nevada, Tomás Olivo. El Ayuntamiento ya ha solicitado oficialmente la cesión, y confía en que la próxima semana pueda haber una respuesta positiva por parte del departamento que dirige Ana Pastor.

Una vez que los viales sean cedidos oficialmente, la responsabilidad de reformar los accesos recaerá únicamente en el Ayuntamiento, que espera poder iniciar la obra antes de final de año. De esta forma, Armilla estaría preparada para la apertura total del centro en 2016. "La responsabilidad recaerá sobre nosotros, que somos los más interesados", indica Sánchez, que apunta que el Ayuntamiento también tendrá que negociar el proyecto con el Metro, con el que ya están manteniendo conversaciones.

El plan del Ayuntamiento de Armilla pasa por la construcción de un carril trenzado paralelo a la vía de servicio de la A-44 que tenga acceso a la rotonda situada bajo esa vía y a la glorieta por la que transcurre el Metro para entrar directamente al aparcamiento subterráneo del Nevada.

El alcalde de Armilla apuntó que la solución adoptada responde a la necesidad de "agilizar" el proyecto. "Aunque tiene un coste, ya que asumimos el mantenimiento de los viales, para Armilla es prioritario", indica Sánchez.

Eso sí, el alcalde asegura que ahora "hay que dar un paso más", y que el arreglo de los accesos al Nevada no será "la piedra angular" del tráfico de la zona Sur, que crecerá exponencialmente en el momento que abra sus puerta el Parque Tecnológico de Ciencias de la Salud. "Este proyecto es un alivio, pero debe haber más soluciones", indica Sánchez.