Aunque esta Navidad sea distinta, habrá luces... y noria. El Paseo del Salón acoge de nuevo la instalación de la noria mirador que el año pasado supuso la gran novedad de las fiestas y que por su éxito se prorrogó hasta el estado de alarma (estaba previsto hasta Semana Santa) y hizo pensar al Ayuntamiento en convertirla en un atractivo turístico más en otro enclave a definir.

Al final se desmontó en junio cuando se levantó el estado de alarma y ahora vuelve a Granada y al mismo enclave, el Salón, a la espera de comenzar a girar, si la situación de la pandemia lo permite.

Según el concejal de ocupación de Vía Pública, César Díaz, la empresa hizo la solicitud para su instalación, ha abonado las tasas correspondientes y "ha presentado un protocolo riguroso de seguridad certificado por la Junta de Andalucía". Con todo, habrá que esperar a ver la situación que autoriza la Junta para Granada a partir del 10 de diciembre según la evolución de la pandemia, porque si la ciudad sigue cerrada, "habrá que desmontarla". Pero como la logística incluye un tiempo de montaje de entre 10 y 15 días, si se espera mucho ya no estaría para la fecha y no saldría rentable.

La intención es que funcione durante la Navidad y esté abierta hasta el 10 de enero. "Aunque la Navidad no será igual que el año pasado, confiemos en que pueda ser lo más normalizada posible si la situación de la pandemia lo permite", ha dicho Díaz. 

Y no será la última vez que se vea la noria en Granada. Según ha adelantado el concejal, se está trabajando ya en el expediente para situar una noria mirador como atractivo turístico fijo en la ciudad de Granada, una intención que viene del buen funcionamiento de la atracción el año pasado y que se tuvo que parar con la pandemia. 

Finalmente, el espacio elegido será la explanada del Palacio de Congresos y se trabaja ya para contar con todos los estudios de Cultura y los trámites para su licitación pública, trámite que llevará su tiempo.