El deporte no se detiene nunca. Aunque la inolvidable temporada 2020-2021 haya llegado a su fin, el fútbol es un medio volátil, en constante circulación y continuado movimiento. El Granada CF no puede perder tiempo en lamentaciones. Diego Martínez forma parte del pasado y cuanto antes se asuma la lastimosa verdad antes se podrá poner a funcionar, de nuevo, el motor de una máquina que funcionaba a la perfección.

Aun así, existen ciertas piezas que, debido a su ininterrumpido funcionamiento, merecen recambios de calidad. Otras, como la que conforma la portería, directamente quedaron extintas. La dirección deportiva del club nazarí, con Fran Sánchez a la cabeza, tiene deberes de obligado cumplimiento mientras dure el mercado estival.

Portería

El vacío más evidente en la plantilla es el que dejó Rui Silva al anunciar su conocida por todos marcha de la entidad rojiblanca. El portugués confirmó el pasado 25 de mayo que no iba a volver a enfundarse la elástica del Granada CF tras cuatro temporadas y media en las que dejó huella. Con su baja –libre y al Real Betis– Aarón Escandell queda como único cancerbero del plantel con ficha del primer equipo y deja dos escenarios posibles: fichar otro guardameta o confiar en el valenciano y subir a Arnau Fàbrega o Joao Costa. El debate está servido. Jordi Masip (Valladolid), Dimitrievski (Rayo Vallecano) o Edgar Badía (Elche) son algunos de los nombres que suenan para suplir la salida del luso.

Defensa

Al poner los ojos sobre la defensa se puede observar que en el lateral izquierdo Adrián Marín no supone ningún tipo de competencia para Carlos Neva. El zaguero gaditano sólo mantiene su regular rendimiento gracias a la autoexigencia a la que se somete y que le hizo perderse parte de la recién terminada campaña por las lesiones. La incorporación de un carrilero zurdo parece tarea obligatoria.

Algo parecido ocurre en el eje y en la medular, donde ha habido múltiples bajas. Jesús Vallejo regresa al Real Madrid tras cesión y Nehuén Pérez hará lo propio en el Atlético de Madrid, por lo que los únicos centrales en propiedad serían Germán, Neyder Lozano y Domingos Duarte. El de San Fernando ha completado un curso irregular, combinando grandes partidos con errores impropios; Duarte será un fijo salvo una oferta irrechazable y Lozano ni está ni se le espera. El Granada intentará retener a Vallejo una temporada más pero deberá esperar a la reestructuración de los blancos para tener opciones de conseguirlo.

Centro del campo

En el centro el campo, Yangel Herrera y Domingos Quina vuelven a sus equipos de origen y Fede Vico parece una partida casi segura al finalizar su contrato el 30 de junio. La buena noticia será el regreso al césped de Luis Milla, duramente maltratado por las lesiones durante este año. También volverá a la dinámica rojiblanca Ramón Azeez, aunque su estancia para el próximo curso se antoja poco probable. Habrá que ver si el siguiente entrenador –el Granada CF es el único equipo de Primera División sin técnico confirmado– pone sus ojos en jóvenes joyas del filial como Isma Ruiz o Antonio Aranda.

Delantera

La parte más alta del equipo es la que mejor cubierta está. La posición de ariete tiene tres candidatos y todos de garantías: los veteranos Jorge Molina y Roberto Soldado y el colombiano Luis Javier Suárez. El ‘cafetero’ espera poder hacerse con una plaza fija de titular en la punta del ataque. En los extremos, sin embargo, sí existen ciertas carencias. Antonio Puertas es el único atacante nato por la banda derecha mientras que en la izquierda ocurre lo mismo con Machis. Kenedy, que disputó hasta 44 partidos entre Liga, Copa y Europa League, deja huérfana la zona ofensiva nazarí con su vuelta al Chelsea, actual campeón europeo.

Sea como fuere, la pronta contratación de un técnico, que parece estancada, aceleraría la reestructuración de una plantilla falta de fondo de armario, coja en varias posiciones y pendiente de las inclinaciones tácticas de su nuevo entrenador.