Rosa de los vientos

Pilar Bensusan

bensusan@ugr.es

Pobrecita

Los granadinos queremos a Sevilla, hermosa ciudad del s.XXI, y a los sevillanos, pero negar la evidencia no es buena política

Ahora que se acercan la Semana Santa y unos días de descanso merecido, como la cosa pinta muy negra, no está de más acudir al salero sevillano para analizar desde otra perspectiva nuestra triste realidad, ya que con un poco de humor las penas se llevan mejor…

Y es que el lamento y quejío sevillanos denunciando la situación de marginación en la que se encuentra Sevilla como consecuencia de que nuestra región sólo se orienta contra el desarrollo de Sevilla y los sevillanos, y que eso ocasiona que sean la provincia que menos inversión recibe, causa, cuanto menos, una sonrisa.

Esto muestra twitter al hilo de alguno de mis artículos. Anulación total de Sevilla, ni metro, ni SE-40, ni nada… sin dinero para infraestructuras, marginada por las Administraciones, que Granada tiene metro teniendo menos población que Córdoba, que Sevilla se está arruinando con la Junta y que crece a menor velocidad desde que existe, que les dan envidia los vascos, que los granadinos tenemos envidia porque no podemos llegar a lo que es Sevilla, que por culpa de granadinos y malagueños están como están… en fin, increíble pero cierto. Pobrecita Sevilla.

Cuando Granada, Jaén, Almería o Huelva están completamente abandonadas y postergadas deliberadamente por la Junta de Andalucía, ¿piensan verdaderamente algunos sevillanos que Sevilla está siendo maltratada por su Junta y que los culpables somos granadinos y malagueños? O no ven o no quieren ver cómo estamos los demás... Aeropuerto abandonado, sin conexión con metro ni ferrocarril, presa de Rules inutilizada, AVE de una sola vía, ínfimas y precarias conexiones ferroviarias, sin Región Militar, casi sin Salas del TSJA, sin movilidad para un área metropolitana colapsada en una conurbación de 600.000 habitantes, con decenas de instituciones desmanteladas o recentralizadas en Sevilla…, la lista es interminable en Granada, e ídem en las demás. Pobreza, pobreza y más pobreza.

Los granadinos queremos a Sevilla, hermosa ciudad del s.XXI, y a los sevillanos, pero negar la evidencia no es buena política. Mientras todos los políticos se hacen la foto de turno sin rubor alguno en el tren Granada-Málaga, más lento que el coche, Granada continúa a la cola de Andalucía, por más que quieran mirar para otro lado.

Si hay sevillanos que envidian a los vascos, quizás debería ser la pobre y maltratada Sevilla quien impulsara su constitución en nueva CCAA, distinta de Granada y su territorio, porque el sentimiento de no pertenencia a la misma autonomía es mutuo. Si pobrecita Sevilla, pobrecitas Granada, Jaén, Almería o Huelva, pero éstas pobrecitas de verdad.

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