Sevilla se estanca y pierde peso en población frente a Málaga y Almería.

La provincia registró el mayor número de habitantes de su historia en 2013, con 1.942.155, y desde entonces ha perdido más de 2.200 residentes. Desde 1998 sólo ha ganado 225.042 nuevos empadronados, la mitad que la Costa del Sol.

La inmigración frena la caída incesante de la natalidad, que se ha desplomado un 30% en la última década. La llegada de forasteros a nuestro país compensó también el aumento de las defunciones.

La cifra se dispara en apenas unos años. El número de mayores de 65 años duplica a los menores de 14 en la capital.

Jon y Arya son los nombres favoritos entre los españoles, aunque también hay quien se llama Sandor, Daenerys, Bran o Gregor.

García y Rodríguez son los apellidos con más presencia, desplazando a los González del segundo al tercer puesto.

Un estudio del IEA evidencia aún más el envejecimiento de la capital, donde apenas hay 14.000 menores de 14 años, frente a los 36.000 de Jerez y los 21.000 de Algeciras.

Alemania y Francia son los principales países receptores de la población emigrante.

El 75% de los vecinos de Cádiz ha nacido en la ciudad, un porcentaje muy diferente al que tienen ciudades que han crecido gracias a la emigración desde la capital, como San Fernando y Chiclana.