Aún así, persisten algunas dudas sobre futuras actuaciones en la vía convencional. Sobre todo las referidas al tráfico de mercancías cuando se ponga en marcha el Corredor del Mediterráneo.

Los expertos consultados por esta redacción creen que una de las más inmediatas antes de que eso ocurra es la adecuación de los diferentes tramos de adelantamiento, apartaderos y estacionamientos, ya que los actuales serían demasiado cortos como para resguardar a grandes convoyes de transporte, ya que algunos llegan casi al kilómetro de longitud, del cruce con otros trenes.

Esta simplificación de Adif de vías de refugio en antiguas estaciones conlleva también la desaparición de algunas de estas infraestructuras destinadas a dar preferencia a unos trenes sobre otros cuando se circula en vía única.

Sin embargo, a pesar de la próxima inauguración de la línea, estimada para finales del mes que viene, a esta le queda mucho trabajo. Con la crisis de 2008 se paralizaron las obras de la doble vía, cuya plataforma ya está hecha entre Archidona y Riofrío, y entre Íllora y La Chana, pero en la que la vía no está instalada. En el tramo intermedio que queda, se hicieron en su día actuaciones de reserva para la construcción de la plataforma para la doble vía, pero que no está ejecutada.

Cuando esta se haga, el tráfico convencional ya podría desviarse hacia su vía original. También aparece en un horizonte lejano la ejecución de la Variante de Loja, reservada de forma exclusiva para el ancho internacional estándar, y el trazado por la localidad del Poniente quedaría reservado para el tren barato y el tráfico de mercancías.