"Paros en Semana Santa y sucesivas fechas". Así de claro lo dejan los miembros del colectivo de conductores del Metro de Granada, que irán a la huelga si no se incluyen los once puntos que exigen a la empresa en la negociación del convenio trabajadores.

En un comunicado, el Sindicato Ferroviario demanda un cambio de "actitud" a Avanza, la empresa que gestiona el Metro de Granada, para no "volver a las movilizaciones". Por esto dan un plazo "razonable" de dos meses y evitar los paros anunciados para una de las fechas más importantes para el turismo de la ciudad.

Estos once puntos son la subida del salario con respecto al IPC de 2018, solucionar la falta de personal, que cuente como tiempo de trabajo toda la jornada laboral, un máximo de 4 horas de conducción, los cursos de formación en horas de trabajo, descansos de 25-30 minutos en la jornada de trabajo, garantizar descansos al menos en 12 festivos, fijar un periodo vacacional de verano, inclusión de los pluses de minuto-conducción y festivo, y que los retenes hagan guardia y movimientos de taller.

El martes pasado hubo reunión entre empresa y trabajadores sin que se hubieran plasmado buena parte de estos puntos dentro del convenio colectivo por que el luchan los trabajadores desde hace meses.